Capítulo 53

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Jhon encendio el auto y puso la fotografía en tablero del auto pegada a un pedazo de cinta, cada vez que detenía el auto la observaba, después a mi y entonces sonreía.

-Tienes que dejar de hacer eso. Me das miedo.

-Quiero ver tu vientre.

En otro momento esas palabras hubieran sido sensuales o algo por el estilo, pero no lo eran, por el hecho de que estaba gorda y llevaba vestido.

¿Cómo me iba a levantar el vestido?

Nege con la cabeza y Jhon hizo una mueca de disgusto.

Giro el auto y siguio conduciendo hasta que paro en un semáforo.

-Por favor- pidió.

-No lo haré- replique.

Jhon puso sus manos en el volante y dejo de mirarme por varios minutos.

-Jhon, te estas portando como un bebé- dije y Jhon siguió sin mirarme o prestarme atención.

Joder.

Por suerte había decidido ponerme bragas no tan vergonzosas, y lo más importante haberme puesto.

Suspire a modo de que no me quedaba otra opción y me levante el vestido hasta que el vientre quedo al aire libre. Mi ombligo estaba raro y mi piel estaba bastante estirada, odiaba verlo, pero me era útil cuando me recostaba y me sostenía el tazón de cerial. Sean cada vez que me miraba con el tazón sobre mi vientre se alteraba, creía que un plato iba a aplastar a los bebés.

-Lo conseguiste.

-Siempre consigo lo que quiero- me miro intensamente.

Llevo su mano a mi vientre, comenzo a acariciar mi piel. Cerre los ojos y recoste mi cabeza en el asiento al sentir sus delicadas caricias sobre mí. Aprete el asiento entre mis manos.

-¿Por qué las mujeres no se ponen un short o algo bajo el vestido?

Brinque en el asiento cuando senti sus suaves labios rozar mi piel.

Alguien nos podria ver, cerre la ventana del automóvil, y mire hacia el frente con el corazón agitado. ¿Por qué demonios había tanto tráfico?

-¿Cómo es que sabes tanto?

-Tengo treinta años.

-Sí- afirme, aunque no me gusto su respuesta -¿Con cuántas mujeres has estado?

-¿Qué?

-¿Qué con cuántas has estado?

-Sí te escuche, pero... ¿Qué clase de pregunta es esa?- como no respondí continuó -No lo sé, ¿Díez?- deje de sentir su cálido aliente sobre mi vientre.

-Oh.

-Clarisse, no hagamos esto ahora- me cruce de brazos -No he estado con nadie desde que te conocí.

-Mentiroso, ¿Y cómo explicas a Miranda?

-Buena esa. Bueno, se me paso. Pero no he estado con nadie desde que me di cuenta de lo tanto que te quieria. No podía sentir con nadie lo que siento contigo, te quiero de verdad, las otras mujeres ya no son mi tipo, por que mi tipo eres tú.

-Bien, iba a decirte por que el 'Te quiero' y no 'Te amo', pero me haz callado con lo último- Solté una carcajada que hizo vibrar mi pecho.

-Te ves linda cuando ríes, perdón, hermosa, o la cosa más linda que haiga, tú te ves aun más. ¿Estas menstruando?

Reí aun más fuerte.

-¡No!, en el embarazo... No menstruamos algunas- me sonroje.

-Lo siento- puso su mano en mi pierna y apreto.

Sombras (EDITANDO)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora