Sombras (EDITANDO)

Capitulo 2

-Clarisse

Estúpida fiesta. ¿Cómo demonios llegue a ella?

Seguí mirando la pista mientras bebía una Bloody mary de fresa; me encantaba su sabor.

Desde que salí del orfanato me la pase molestando a Jhon, quien ahora es mi padre, un tipo de unos treinta años, que a pesar de ser un hombre muy atractivo su personalidad es un asco. Demonios, ¿Por qué los hombres mayores son tan atractivos e idiotas?

No conocía muy bien a Jhon, apenas llevaba unas horas de conocerlo pero estuve el tiempo suficiente para darme cuenta que es un idiota, porque ¿Quién adopta a una chica de 17 años?

Di otro sorbo a la bebida y me puse de pie. Llegue a la pista y comencé a mover mis caderas de un lado a otro al ritmo de la música. Extrañaba tanto bailar.

Cada fin de semana en el orfanato Sean y yo nos escapábamos e íbamos a bares a divertirnos y beber, siempre Sean tenía que cuidarme ya que yo acababa demasiado ebria o los chicos se me tiraban encima. Era algo que molestaba mucho a Sean. Sean es como mi hermano, es mi mejor amigo.

Probablemente si no hubiera sido huérfana saldría todos los días de fiesta.

A veces me pregunto que habrá pasado con mis padres y la razón de mi abandono, no me gusta pensar mucho en eso, siempre termino deprimida o molesta con todo mundo.

Pasaron varios minutos mientras bailaba sola en la pista, cuando sentí unas manos en mi cintura. Esperaba que el chico detrás mío fuera Sean, lo extrañaba, pero después sentí un cuerpo pegado a mi trasero, ladeé mi cabeza y así mirar de reojo a la persona, ese no era Sean. Era un tipo de ojos azules y cabello marrón oscuro, sonrió ligeramente y comencé a moverme nuevamente.

*

-¡Demonios!, eres hermosa- comenzó a alegar Noah. Reí y lo tome de su camisa arrastrándolo a la carretera.

-No más que tú- susurre cerca de sus labios.

Coloco sus manos en mi cintura y me atrajo hacia el juntando nuestros labios, incline la cabeza para que el beso fuera mejor, sus manos habían tomado mi cintura pero en un movimiento rápido las llevo a mis mejillas y así darme un profundo beso, con sus manos acaricio mis mejillas, me estremecí ligeramente, tal vez era que estaba muy bebida.  Sonreí sobre sus labios.

-Eres muy hermosa- susurro entre besos, mordió mi labio y me separe de él.

-Tengo que irme. ¿Qué hora es?

Sin alejarse de mí, saco su celular y al ver la hora hizo una mueca.

-Las doce- respondió.

Un claxon hizo que me alejara de un brinco de Noah. Mire alrededor y mire una Cadillac pick up blindada, Noah se alejó nervioso y yo lo tome del brazo haciéndolo detenerse.

Maldito cobarde.

-¡Mierda!- creí susurrar pero en realidad grite cuando vi a Jhon bajarse muy molesto de la camioneta.

-¿¡Clarisse!?- grito Jhon, corriendo hacia nosotros.

Jhon llego hasta nosotros, parecía agitado y muy preocupado, se detuvo frente a nosotros y me miró fijamente. Noah me tomo de la cintura acercándome a su cuerpo, la luz ilumino el rostro de Jhon y él fruncía el entrecejo.

-Aquí estoy- dije, con los ojos muy abiertos por la impresión de que me haya encontrado.

-¿Dónde estabas?, llame a la policía. ¿Cómo te atreves a salir si no conoces el lugar? y...- comenzó a decirme pero se detuvo al ver las manos de Noah en mi cintura -¿Quién es él?- pregunto señalando a Noah.