Ella Es Una Playboy [TBAGP "2"]

4| , conociendo gente nueva, invitaciones indeseadas y Starbucks

Camine por las calles y llegue al hospital. Últimamente estaba visitando a kyle a diario. Nada hacia que no lo viera o que no estuviera al tanto de cualquier situación. Algunos de los vigilantes de la CIA estaban al tanto y vigilando la habitación para poder ver si esas arpías regresaban.

Entre en ella y ví la cara de el. Su cabello estaba mas largo cada día y la barba aumentaba.

-hola bestia - hace tiempo que no le decía así. Era algo extraño hacerlo después de tantos meses. - tengo tantas cosas que contarte. En dos días es el cumpleaños de Maddie. Y quisiera que despertadas por ella y por tus padres. Pero. Mas por ella. - deje las flores en el jarrón y me asome por las ventana. Había muchos edificios y tráfico en las calles.

Además de eso. Caían copos de nieve. Y el central park. Que estaba cerca se veía blanco de lejos. Quería ir para allá, nada mas fui una sola ves y nunca mas volví a ir. Eso. Me acuerdo yo fue en un pequeño paseo que hicieron las monjas de el orfanato.

Me acerque a kyle, le di un beso en la frente y salí del cuarto para poder ir para el central Park.

Salí del ascensor y camine hasta la salida. Baje unos pequeños escalones y silbe para pedir un taxi. Me subí a este y le indique mi parada.

-ese lugar es muy hermoso en esta época señorita- yo asentí y seguí mirando por la ventana. -¿usted no es la modelo de Italia Jade Thompsom?-.

-si. Soy yo ¿por que?- el abrió los ojos como platos. No sabia que era tan conocida ya que apenas llevaba trabajando unos seis meses y medio. Aunque ya me he tomado muchas fotos muy coquetas. Pero no pensé que llegaría hasta aqui-.

-wow. Mi hijo la ama. Y a mi hija le encantaría tener su cabello.- yo le Sonreí. Se sentía bien que la gente te reconociera por cosas buenas.

-¿y como se llaman?- el seguía manejando, pero me miraba por el espejo interno del coche. Era un señor como de setenta años, su cabello estaba ya canoso y sus ojos se detallaban mas por el simple hecho de ser todo blanco.

-mi hijo se llama Derek el tiene veintiuno y mi hija Katleen que tiene catorce- yo Sonreí. Me gustaría conocerlos.

-¿y si los conozco? Yo no tengo ningún problema en esperar en el central park. -el pareció pensarlo un rato y después me sonrió creo que agradecido.

-si. De verdad muchas gracias señorita Thompsom. Pero. No quiero que pierda su tiempo. Usted debe de estar muy ocupada y yo no quiero interferir en sus asuntos- yo negué sonriendo

-no se preocupe. Yo muy complacida puedo conocer a sus hijos. Además. No tengo mas nada que hacer hoy- el me agradeció. Y me dejo en el central park. -gracias.

El señor llamo a los que creo eran sus hijos y se quedo esperando a que llegaran. Cuando veo a los diez minutos que en otro taxi se acercan dos personas. Una niña con el cabello marrón chocolate y ojos avellana y un chico con el cabello igual pero con ojos negros. El chico tenia una camisa verde oscura un jean azul y unas vans negras.

La niña llevaba un vestido verde aqua con estampado de figuras blancas, unos botines negros, un suéter blanco, una bufanda blanca, guantes del mismo color y un sombrero como los que usan en el jazz negro. Estaba vestida muy bien, de hecho eso nunca se me ocurrió. Y pensé en vestirme así mas seguido.

Ellos se acercaron a mi. Incluso el señor Meyer. El taxista tan amistoso.

-el es derek y ella es Katleen mis hijos. -yo los salude y mire al señor muy atenta- bueno señorita Thompsom. Me tengo que retirar por que tengo que seguir trabajando.- yo saque dinero de mi cartera y le pague de mas.

-puede quedarse con el cambio señor meyer. - el sintió.

- gracias por todo. Un placer conocerla y espero verla de nuevo algún día señorita.- el me recordó mucho a marshall. El se fue y yo me despedí con la mano.

-hola señorita Jade- me dijo el chico. Me rei- ¿o quiere que le diga señorita thompsom?- yo me volví s reír a lo que ellos me miraron confundidos.

-ahg por favor llamenme Jade solamente. Y pueden tratarme de tu.- ellos asintieron y comenzamos a caminar a dentro del parque cubierto de nieve. Todo era tan blanco y tan puro.

-eres mi modelo favorita. -yo asentí a derek y seguí caminando.- ¿puedes contarnos de ti?.

-bueno. Mi vida ahora no es fácil. Tengo a alguien muy especial para mi, en coma desde hace ya casi ocho meses. Soy adoptada y no se donde esta mi verdadera familia.

-wow. ¿no te han intentado de contactar?- yo negué. Era lo ultimo que necesitaba en ese momento.

-tengo a mi mejor amiga y chef Annieh. Ella no es tan popular, aunque quiere crear un restaurant aquí en new York.

-genial.- dijo la pequeña niña. Katleen. - Lástima que sera algo costoso para nosotros. Pero a tu amiga le deseamos suerte.-yo me reí. Eran muy buenas personas.

- ¿vamos por unos Hot Dog? -dije. Ellos asintieron y caminamos hasta un pequeño puesto- dame uno sin cebolla ¿de que quieren ustedes chicos?.

-uno si cebolla, ni mostaza - dijo la pequeña katleen de catorce años. Mire a derek y el se cruzo de brazos.

-¿tu no quieres derek?- el me miro mal.

-no quiero que gastes tu dinero en algo que no deberías Jade. No me gusta.- yo bufé. El era uno de esos hombres machistas.

-haga solo los dos señor. Alguien machista no quiere- el para ser mayor que yo. Era un imbécil. Y eso no se lo digo a todo el mundo.

-ahg- dijo derek. Yo le di el hot Dog a Katleen y e empecé a comer el mio. Caminamos mas y mas. Y como nos dolían los pies nos sentamos en una banca.

Después de quince minutos sentada veo a un chico. Era James. Aunque no quería, me acerque a el para, al menos saludarlo..

- hola James. Que raro verte por aqui- dije, el me miro y se levanto para abrazarme.

-hola hermosa.............. - el miro a derek y a Katleen y después me volvió a mirar a mi- ¿quienes son estos?- lo mire mal y lo golpee en el hombro. Muy fuerte.

-"Estos" como tu les dices, son unos conocidos- derek le tendió la mano a James y este la miro con desprecio. Yo le pise el pie y se quejo- ups, disculpa. ¿eso te dolió?- si, aveces yo podía ser una perra sin sentimiento alguno.

-hola. Un placer mi nombre es derek. - ellos se estrecharon la mano y después se presento con Katleen que estaba mas que sonrojada. Aunque no la culpo. El era un chico muy atractivo, ojos grises, cabello castaño, como de un metro ochenta, tez blanca y musculoso. Pero, a pesar de todo era demasiado empalagoso para mi gusto.

-ah. Bien.- el me abrazo por los hombros. Y yo lo corrí.-bueno preciosa..... Pensaba llamarte para preguntarte ¿si querías ir a Starbucks conmigo?

yo mire a derek y a Katleen y por ultimo a James.- ¿ahora?- el me miro esperanzado y después asintió.- tengo compañía James..... Sabes que no puedo dejarlos. Seria una falta de respeto, ya que les prometí pasar tiempo con ellos.

-oh. Bueno, si quieres vamos mañana.- tenia un millón de escusas para no ir. Pero hace un rato no iba a Starbucks y en serio necesitaba mi café con caramelo leche y crema.

-bien. Mañana a las diez Am. ¿te parece bien, James?- el asintió y me dio un beso en el cachete. Cuando venia abrazarme, me aleje y casi se cae.

-vale. - dijo el. -nos vemos guapa.

-aja- le dije cortante. Cuando se fue yo mire a derek y a Katleen - ¿que quieren hacer ahora?- les dije.