Capítulo 02

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Jong In

-Eres mi amigo... -Contestó -Me importas mucho, Jong In.

-No parece, Bo Hwa.

-Es la verdad. Pero es tu problema si no lo crees, sólo lo repetiré ésta vez, Jong In. Me importa ésta amistad y por consiguiente, tu también. Y de verdad, discúlpame por cada vez que te ofendí o si te sentiste mal -Me dijo mirándome a los ojos, pero ella era un témpano de hielo y aunque me dolía admitirlo, Bo Hwa jamás estará disponible para mi, y no quiero ser más su burla ni la de los chicos.

-No importa cuántas disculpas me pidas Bo Hwa, siempre seguirás siendo la misma fría Hwabbie. No quiero volver a toparme contigo -Y nada me había dolido más que aquello, pero ya estaba en mi límite.

-Pero... Jonginnie... -Trató de hablar pero simplemente le corte.

-Basta de ese estúpido mote y la respuesta es no -Y fue lo último que dije.

***

Ya habían pasado cuatro meses que no había vuelto a hablar más con Bo Hwa, ni con los chicos a excepción de Tae Min, quien aunque le dijera que se alejará de mi, quinientas veces, él seguía juntándose conmigo, por lo que no me quedó más remedio que seguir siendo su amigo, y eso en parte, me hizo feliz.
Después del quinto mes, Baek y Sehun, empezaron a reunirse conmigo, KyungSoo me miraba mal en ciertas ocasiones y la verdad es que ya no importaba... No tanto.

Rachel Williams, era la chica que salía conmigo, era una chica... Problemática y atrevida, me gustaba andar con ella y con Amber Walls.

- ¡Kai! -Me había llamado Rachel, depositando un beso en mejilla.
Ambas me habían puesto un nuevo apodo, y me gustaba, no era tan ridículo como "Jonginnie" y sin querer, o tal vez si, empecé a pensar en Bo Hwa, aunque sonara masoquista aún la extrañaba.
Casualmente la veía caminar por ahí con la mirada baja o simplemente, pérdida en su mundo, luego aparecía Soo y ella volvía a ser feliz, y me dolía el hecho de que, tal vez, jamás le importé.

- ¡Hey! ¡Kai! -Me sacó de mi ensoñación Amber y Rachel, pero la segunda dibujó una sonrisa lasciva se mostró en sus labios -Estás pensando en la carita de bebé ¿Cierto? -Me molestó, yo solo rodé los ojos.

-Mejor vete, Rachel -Le espeté molestó, y dirigí mi mirada a Amber, quien de un Momento a otro, dejo de sonreír. Suspiré, no había podido evitarlo, pero mi amiga me había confesado sus sentimientos hace dos días, al principio era incómodo pero después de horas ella volvió a actuar como la chica ruda que era, y asumí que simplemente, no quería darle más importancia al asunto. Rachel no sabía, a pesar de que ambas eran mejores amigas, de su pequeño enamoramiento conmigo, por eso no la culpaba, ella jamás dejaría de decir sus comentarios atrevidos y fuera de contexto.

-Bueno, chicos. Me largo, tengo cosas qué hacer -Y se fue, sin más. Rachel me miró extrañada por su amiga, pero se limitó a encogerse de hombros, y colgarse en mi brazo como un oso perezoso.

- ¿Qué quieres? -Le pregunté, ella era afectiva de ese modo cuando necesitaba algo de mi.

-Te quiero, Kai.

- ¿Y...?

-Solo te quiero...

-Pedir algo, suelta ya. Estás siendo muy pegajosa -La molesté sacudiendo su brazo. Ella me propinó un golpe en la nuca.

-Bueno... Se qué esto no te va a gustar, pero... Es que... Sólo acompañame, bruto -Y empezó a arrastrarme hasta el patio de uno de los edificios en donde se encontraba una fuente sin uso.
La verdad era que el lugar era bastante silencioso y casi no habían estudiantes rondando por allí.

-Se que me vas a perdonar por esto, bonito. Sólo quiero ver al mismo Jong In de antes, no a éste sujeto frío y seco -Me dio un beso y se fue de allí, dejándome sólo y confundido.

-Jonginn~ Jong In -Era Bo Hwa. Reconocería la ronca, pero femenina voz suya, dónde sea -Te ves bien -Dijo señalando mi ropa y mi cabello. Fruncí el ceño, no creo que ella vino a adular mi vestimenta y mucho menos, a preguntar en dónde la había obtenido.
Ignoré su comentario y enarqué una ceja para que me dijera que quería en realidad.

-Ehm... Se qué no eres mi amigo, y tampoco me debes nada... Pero en realidad te necesito -mi cuerpo se tendió de la emoción y esperanza al escuchar esas palabras, pero eres Bo Hwa y podía esperar cualquier cosa menos lo que imaginabas -Es decir, no es que te necesite de necesitar, sólo que en realidad necesito que me ayudes en un asunto -Clic. Todo encajó.
Al parecer ella sólo me veía eternamente como su mascota. No emití ningún sonido, esperando que acabará con esto de una muy buena vez, no quería seguir atado a ella de ninguna manera.

-Mamá se va a casar con este tipo, John d'Aé, por lo que necesito un acompañante y ella pretende emparejarme con el hermano menor de él... y ya pregunté a los chicos, pero ellos no pueden.

-Está bien.

Bo Hwa.

Parpadeé sorprendida de que haya accedido tan fácilmente y me haya creído lo del hermano menor.
Interiormente comencé a pegar gritos, desde que Jonginnie me había dejado de hablar, me hacía falta como loca, no podía parar de pensar en cómo estaba y qué hacía. Verlo con la rubia y la otra pelirroja me hizo arder en celos y si, no me costaba admitir el hecho de que estaba celosa. Para Jong In siempre había sido su centro de atención y él, el mío, sólo que era lo demasiado orgullosa para mostrar mis sentimientos, creyendo que algún día, el dulce Jonginnie iba a confesarse. Pero jamás pasó, y en esos meses, su actitud era más fría y seca, a las chicas las rechazaba con un simple NO, y se iba dejándolas con la palabra en la boca, la verdad es que ya no era Jong In, era Kai, según las chicas de mi facultad, él era lo mejor de lo mejor, una gran mente tras una cara preciosa.

Me daban ganas de partirle la cara a todas ellas, pero no podía hacer nada.

Jong In había sido mío, y lo seguirá siendo.

- ¿Cuándo es la boda? -Preguntó y lamió sus gruesos labios en el acto, me quede observándolos, ahora mismo quería besarlo, pero aclaré mi mente y respondí.

-Es en cinco días, pero mañana en la cena de ensayo, por lo que habría que irnos en la mañana o ahora -Él chequeó su reloj y asintió.

-Supongo que nos vemos dentro de dos horas, necesito asearme y empacar maletas, tu también, creo. Y también supongo que vendrás por mi al edificio en tu coche. Adiós Bo Hwa -Y giró dándome una vista de ancha y musculosa espalda y su trasero redondo, sentí mis mejillas ponerse Rojas... ¡Ay! Jonginnie, al parecer habías cambiado bastante desde que mancharon tu cara de pintura, dejaste aquel inexperto y tímido chico en todo un hombre, y valla que lo eres.


Bitter Sweet ➡KaiDonde viven las historias. Descúbrelo ahora