El hermano de mi novio (Tú y Theo James)

Mis padres

Ser yo es dificil.

Pero estoy segura de que ser otra persona también lo sería.

Cuando alguien me interrumpe, me irrito.

Cuando leo y tocan la puerta, me irrito.

Y más cuando los que hacen esas cosas son mis padres. Esa pareja que trata de arruinarme la vida lo más posible alejandome de mis amigos y de mi novio que para ellos es "Rarito"

Saben, cuando ustedes no aguantan ,ás el peso de las peleas y deciden que lo mejor es separarse para siempre y no volver a ver a esa otra persona.

Eso es lo que me pasó esta mañana.

-¡Abril!¡BAJA YA DE TU CUARTO!

Otra vez, interrumpiendo mi vida.

Bajo las escaleras, aún con mi pijama.

-¿Qué haces sin vestir?-me pregunta mi mamá mirandome con esa típica cara de desaprobación.

-No pienso ir a la escuela hoy.-le digo tomando una frutilla del refrigerador, las amo.

-Claro que vas a ir.

-Ah, no. Claro que no.

-Abril, creo que no entiendes que no hay opción. Es ir o...

-Si, si. O ir. Ya me se tu discurso de memoria. Me harté de ti. Y también de ti, papá.

Este estaba sentado leyendo el diario en la mesa. De pronto alsa la vista para verme a mi. 

Entonces tomo otra fruta y subo a mi cuarto.

-Si faltas hoy, no pienso dejarte salir ni invitar amigos por seis meses.-me dice mi mamá.

Entonces me freno en seco.

No, no voy a hacer caso a sus jueguitos.

-Que miedo...-le digo terminando de subir las escaleras.

Como me gusta dejarla así parada. Saber que se ha tragado lo que le he dicho.

Y así gritarme que no le responda, y saber que lo he hecho.

Es victorioso.

Ya estoy grande para castigos. A punto de cumplir los veinte y mi madre me manda.

La adolescente parece ella.

Subo a mi cuarto y me pongo a escuchar música.

Alguien golpea la puerta.

-Vete-le digo a esa persona que esté afuera.

Entonces veo que mi madre ha entrado al cuarto. Me paro y, aunque sé que este mal, la empujo afuera. 

-Oye-le digo-No pases la línea esta-marco una línea en la puerta-o tendrás serios problemas conmigo.

-¿Problemas? No lo creo. Yo soy tu madre, no una amiguita más. Entro y hago lo que tenga ganas. Ah, y algo más. Si vas a quedarte aquí hoy, no te dejaré salir con Patrick.

-¿Patrick? No te atreverias...

-Ah que no.

-Te odio más que a nadie en el mundo, de veras. Y quiero que lo sepas.

Entonces veo que está llorando y que mi padre ha subido.

-Vayanse, ahora. No quiero ni verlos. Me dan asco.

Entonces mi padre va a entrar a la habitación y mi madre lo frena.

-Dejala, lo sufrirá-me dice.

Lo sufriré.

Eso fue lo que me dijo.

Yo también te quiero, querida mami...