Capítulo 2

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Carrie no despegó los ojos del apuesto chico a su lado por toda la hora de Computación, sin miedo a ser descubierta por él, que si bien parecía la persona con mayor confianza en sí misma en el universo, no lo era, aunque tampoco era idiota. Gracias a que él decidió enfocarse en observar otras cosas: como la pantalla del monitos de la computadora y la hermosa Melinda Sammuels.

Y como Carrie había observado cada movimiento de Logan por toda aquella hora, no pudo evitar darse cuenta de aquello, por lo que se frustró un poco. ¿Tanta atención hacia él para nada? ¿Iba a permitirlo? Ni en un millón de años.

—Ey —lo volteó a Logan, con un único objetivo en mente—. ¿Qué haces?

El chico no parecía darse cuenta de la situación, ya que é estaba distraído mirando a Melinda. Tanto, que no pudo notar ni por un segundo la asombrosa forma en la que los ojos de Carrie de derritieron mientras lo miraban, por toda aquella larga hora.

—Nada, las tareas —miró el monitor de Carrie, nervioso, para cambiar de tema—. Algo que tú no hiciste.

—Ah, sobre eso... ¿Me la envías por mail?

Logan rio, pensando que aquello último era una broma, pero no. Carrie estaba seria como una tumba, en realidad. La verdad era que en serio no sabía cómo hacer los ejercicios, y no estaba usando eso como excusa para hablarle a Logan. Solo le había hecho la pregunta porque se sentía cómoda con él. Algo en aquello le hizo sentir lo contrario. ¿Cómo era posible que se sintiera cómoda con un chico que acababa de conocer? Claro, era guapísimo. Pero, ¿y si no pasaba por eso? ¿Y si ellos estaban destinados a ser grandes amigos? Esa idea también le sonó tentadora a Carrie, al haber querido siempre tener el mejor amigo hombre del mundo, de tener esa conexión especial que tanto había oído nombrar en las célebres novelas y películas.

—No sé. ¿Lo mereces? —respondió él, guiñándole un ojo. Acto seguido, pulsó la tecla mágica enviar, y en segundos, Carrie tuvo un diez en Computación más que asegurado.

—Genial. Supongo que esto nos hace amigos, ¿no?

—¿Para tener dieces en Computación, no? ¿Siguiendo tus consejos?

Ambos rieron. Al parecer, la existencia de dicha conexión sí era posible después de todo.

—Créeme, te conviene tenerme a tu lado. Sobre todo por mi habilidad para convencer a las chicas.

Acto seguido, Carrie miró a Melinda, haciendo que Logan inmediatamente se diese cuenta de lo que pensaba Carrie. Pero a juzgar por su cara de sorpresa, no le pareció una idea demasiado buena.

—Si esa habilidad existiera, mínimo sabrías que hacer algo así me hará quedar como un completo idiota si haces eso.

Carrie se encogió de hombros, mientras se preguntaba por qué se había ofrecido a conseguirle pareja a Logan, que era la descripción exacta del chico ideal para ella. Sabía que eso implicaba dejarlo ir —y eso significaba para siempre, dado que Melinda era una de las chicas más bonitas del instituto. Tanto, ¿qué Tal vez Carrie había decidido rendirse con él? Era cierto que Logan podía conseguir a la chica que quisiera... Y también debía considerar la posibilidad de entablar una gran amistad con él, que sonaba muy tentadora.

—¿Se te ocurre una mejor idea? —«Creo que será mejor no arriesgarme e ir por el camino seguro... después de todo esto me asegurará ser su mejor amiga», se dijo. «Puedo soportar ver a una persona tan linda y tan inalcanzable y tan perfecta para mí en brazos de otra, mientras que realmente sepa apreciarlo. Aparte, apenas conozco a Melinda. Tal vez... sea alguien muy dulce»—. ¿Has hablado antes con ella? —él negó con la cabeza, avergonzado—. ¿Siquiera cruzaron miradas alguna vez?

—No, pero... Hubiese pasado, de no ser por lo tonto que soy —Logan no pudo evitar apartar la cabeza para dejar de ver a Carrie a los ojos, ya que le costaba demasiado admitir eso—. Porque cada vez que me mira yo... Aparto la mirada. No soporto que me miren. Me hace sentir tan vulnerable...

Carrie posó su mano cariñosamente en el hombro de su nuevo amigo.

—Sí, deberías mirar a la gente a los ojos más a menudo. Eso les hace pensar que eres fuerte, aunque la vergüenza te carcoma por dentro —sin embargo, esto no pareció contentar al tan avergonzado chico—. Pero... eres muy abierto. Eso te suma muchos puntos a favor, además de que luego de verte bien ella...

Al ver ella que estaba hablando de más, como acostumbraba hacer, ya que adoraba expresarse con la gente porque la hacía sentir realmente cómoda de alguna forma, se detuvo inmediatamente. Era cierto que ahora pensaba ser su amiga y ayudarle, pero tampoco podía hacer tal confesión. Porque, ¿quién iba a querer ser amigo de una chica que podía pasar horas admirando su rostro perfecto? Era algo extraño.

—¿Ella qué?

Justo cuando estaba a punto de suceder una catástrofe de la que Carrie no iba a poder salvarse, sonó la campana, y todos salieron corriendo de la clase a modo estampida, por lo que la conversación se perdió por completo.

—Bueno, recuerda que debes mirar a la gente con los ojos. Trata de penetrar sus corazones con tu mirada.

«¿Penetrar sus corazones con su mirada? ¿Quién rayos decía eso? Hasta quedaría raro si estuviera escrito en un libro...», se avergonzó ella.

—Eres graciosa —rio él. Luego se le quedó mirando a los ojos, haciendo exactamente lo que Carrie le había recomendado. En verdad lo hacía muy bien. Tanto que le daban ganas de besarlo...

—Sí, así vas bien —dijo ella bruscamente luego de apartarse de él de un salto, al no poder resistir la tentación de besarlo.

«Es algo... perverso que me mire así, sabiendo lo provocante que es...»

~~~

El almuerzo fue algo agitado para Carrie; lleno de rumores y secretos y sorpresas. Por supuesto que ella adoraba todo eso, pero esa mañana se sentía distinta...

—...Y hablando de nuevas parejas, me han dicho que te vieron hablando con Logan Weiss —dijo Kathy, la mejor amiga de Carrie, despertándola de su trance de drama—. Conociéndote Carrie, ya debes estar saliendo con él.

La carcajada general fue inevitable, ya que Carrie tenía la fama de tener éxito con los chicos. A veces, hasta demasiado —según decía todo el mundo—, pero era querida entre los estudiantes de Light Hill.

«¿Él es popular? ¿Pero cómo? Nunca antes habían hablado de él las chicas...»

Al darse cuenta de que no hubo respuesta humorosa por parte de su amiga, Kathy frunció el ceño y comenzó a agitar a Carrie, sedienta de una respuesta que confirme tal caliente rumor.

—¿Entonces? ¿Están saliendo o no? ¡Dímelo!

«Piénsalo bien», reflexionó Carrie. «Ella es tu mejor y más grande amiga, pero sabes que falla demasiado a la hora de guardar secretos. Pero por otro lado, que todas en la mesa piensen que sale con tal galán, la llevaría a la cima. Y aparte, ¿quién garantiza que eso iba a esparcirse por todo el instituto? Ellas tampoco han hablado con Logan en sus vidas... así que... ¿no hay riesgo alguno, verdad?

—¡Carrie! ¡Dinos! ¿Acaso quieres que explotemos, niña? —chilló otra gran amiga de ella, Castaña Mindy, que a diferencia de Pelirroja Mindy, siempre lograba captar la atención de Carrie, al ser una chica realmente carismática.

—¡Está bien! ¡Sí, rayos! Estoy saliendo con él...

—¡Dios mío! Hay que contarles a todos... —empezó a decir Pelirroja Mindy, que comenzaba a agradarle menos a Carrie.

—¡No! —chilló Carrie, a tiempo de evitar que explotase el chisme.

—¿Estás loca? Si supieran todos que sales con él... —cuestionó Kathy, casi al punto de empezar a dudar de Carrie.

—Sí, lo sé. Pero no es oficial todavía...

—Muy bien, nos callaremos —comentó Castaña Mindy, con una sonrisa pícara—. Pero cuando sí lo sea... Tendrás que cuidarte de todos los lobos hambrientos que comenzarán a notarte más...

La carcajada general estalló otra vez, al igual que el destino social de Carrie.

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