Daddy to be: Jeon Jungkook

15

Jungkook

"Siento no poder acompañarte esta noche con los aeróbicos. Me he encontrado con Hae Soo y me ha pedido que me quede en su casa para cuidar a su madre. Descansa."

Sostengo las bolas aeróbicas algo decepcionado, después de que he comprado todo esto... ¿Por qué sentía que era mentira? Ella no lo haría, ¿o sí? Quizás son ideas estúpidas mías, tan solo debería ir a dormir. 

Así que preparo la cama y me acuesto sobre ella como solía hacerlo... en soledad. La cama parece mucho más grande sin ella, no me había dado de cuenta cuanto la necesito. Paso mi mano por la sábana, la imagino a mi costado con su vientre expuesto. ¿Por qué siento que hay algo que no está bien?

Estoy jodidamente enamorado de ella, ¿qué haría si algún día de repente no está? No podría vivir sin sus besos, caricias, abrazos. Soy un alma vacía sin ella, una persona sin propósitos. Soy un adolescente perdido y loco por Yoo Soo. No puedo esperar a verla cargando a nuestro hijo en sus brazos y pidiéndome que la ayude con él.

A las tres de la madrugada logro quedarme dormido y siento como si hubiera descansado cinco minutos para cuando suena la alarma. Me despierto aturdido, esperando verla a mi lado pero luego recuerdo que no ha pasado la noche aquí.

Marco al telefóno de Yoo Soo pero no obtengo respuesta. Sé que algo está mal. Busco el historial en mi móvil y logro encontrar el número de Hae Soo, al tercer timbre, ella contesta.

—Hae Soo, ¿Está Yoo Soo cerca de ti? Solo quiero asegurarme de que ha dormido bien...

—¿Yoo Soo? —pregunta confundida— No sé de qué hablas, ella no pasó la noche aquí... pensé que vivían juntos.

Mis nervios aumentan, sabía que era una mentira. No me despido, simplemente termino la llamada y comienzo a vestirme rápidamente. Agarro las llaves de mi auto y emprendo camino al único lugar que ella podría estar... en casa de su madre.

Al llegar a mi destino, mi puño toca con fuerza la puerta y cuando por fin, está abierta, su madre aparece como si ya me esperara.

—Oh Yoo Soo... ella no pasó la noche en la casa, me mintió con que estaría con Hae Soo cuidando a su madre pero no es así —le digo, temblando— ¿Está ella aquí?

—Jungkook —comienza ella— Ella pasó por aquí, pero se ha marchado hace un rato...

—¿Qué? ¿Entonces por qué no ha llegado a la casa? —estoy desesperado, buscando una respuesta— ¿Por qué no me llamó para avisarme en primer lugar?

—No debería decirte esto... —toma una pausa— Me suplicó confidencialidad pero lo único que ella quiere es una explicación...

—¿Qué explicación?

Deja ir un suspiro, para luego pasar las manos por su frente.

—Tu anterior compromiso...

Y al escuchar eso, mi mundo viene abajo. Mierda. No puede estar pasando justo ahora. No pensé que fuera a ocurrir tan rápido.

—Solo ve al aeropuerto y detenla —dice su madre pero ya yo me he dado media vuelta, dispuesto a buscarla— ¡Estás a tiempo!

Cuando me encuentro en la carretera, mis pies dan con el acelerador hasta más no poder. No puedo permitir que se vaya, mucho menos con un bebé dentro de ella. Todo está arruinado y sé que para convencerla tendré que mover las montañas. Yu Ri... no hay nadie más en este mundo que haya podido intervenir entre nosotros de esa forma. Siento que el camino es infinito y que nunca terminará. Mi estómago da miles de vueltas mientras tanto de esquivar cualquier auto que atrase mi camino.

Por fin estoy en el aparcamiento y salgo del carro corriendo como un loco desesperado. Hay varias personas mirándome pero no me importa. Corro escaleras arriba, mirando a todos lados y no puedo ni tan si quiera divisarla. ¡Qué frustración!

"Pasajeros del vuelo 208, por favor pasar por el área de entrega de pasajes y luego abordar el avión"

Vuelvo a correr ligeramente entonces para el área de entrega de pasajes y es cuando logro divisarla... no pensé que sería capaz de hacerlo. Me acerco lentamente a ella y arrebato su pasaje cuando está a punto de entregarlo. Con sorpresa, ella gira su cabeza en mi dirección y yo tomo su brazo.

—Si nos disculpa, tomaré a mi esposa. Ya sabe, el parto está postulado para hoy y ella quiere huir porque tiene miedo. —miento

La empleada se queda confundida pero ya yo estoy halando a Yoo Soo para la salida... Ella comienza a hacer fuerza contra mí, para que la suelte pero no estoy dispuesto.

—¡Jungkook, suelta mi jodido brazo de una buena vez! —grita y la pego a mí tomando sus labios pero me aleja bruscamente y su mano impacta con mi mejilla— ¡No vuelvas a besarme de esta forma de nuevo, Jeon Jungkook

—¿Qué te da el derecho de mentirme y tratar de escapar en estas condiciones? ¿Te has vuelto loca?

—¿De verdad vamos a hablar de mentiras? —susurra, entonces puedo ver lo dolida que está y solo quiero abrazarla— ¿Por qué no me dijiste que estabas comprometido? ¿Pretendías que viviera como si nada a tu lado de esta forma?

—Estaba comprometido con ella, sí, pero estábamos separados para aquel tiempo. —trato de explicar— El hecho de que llevaba un anillo en mi dedo no significa que todo estaba bien. ¿Crees que estaba con ella por amor? ¡Mis padres me obligaron a comprometerme por pura conveniencia! Te admito que la quise pero nunca estuve enamorado de ella, Yoo Soo, estoy jodidamente arrepentido de no haberte dicho la verdad desde un principio...

—¡Ya no sé si creerte! ¿Y si esto es una de tus mentiras? —pregunta alterada, su rostro tornándose rojizo— Dices que me amas pero me mientes... ¿Qué tipo de persona hace eso?

—Te mentí exactamente porque te amo... porque temía tanto que te fueras de mi lado, que me juzgarías por la misma razón —susurro y siento que voy a morir

Sus ojos se llenan de lágrimas.

—Dime que no te mantuviste conmigo desde un principio solo por lástima...

—Me mantuve contigo desde un principio porque me gustabas, Yoo Soo, porque no quería estar más solo. Cuando te encontré, sentí que veía la luz frente a mis ojos —comienzo a acercarme a ella, temiendo a que se aleje pero no lo hace— Si fuera así, no te detendría y dejaría que rehicieras tu vida pero no puedo... te volvería a buscar cuantas veces sea necesario.

Entonces, no espero más y la abrazo. Ella no ejerce fuerza contra mí pero siento como si se removiera incomoda. ¿Necesito volver a confesar mis sentimientos?

—Jun...Jungkook —dice temblando

—Por favor, créeme, cariño.

—Jungkook —repite— A... acabo d...de romper fuente.

¿¡Qué!? La suelto rápidamente y miro para comprobar; efectivamente. ¿Qué hago en este tipo de situaciones? ¿La cargo en mis brazos o llamo a la ambulancia? ¡Dios mío! Tengo mi auto, así que la primera opción suena más coherente. Yoo Soo comienza a quejarse de dolor, poniendo mis nervios de punta y lo único que hago es tomarla en brazos.

—Las contracciones están aumentando, Jungkook —se queja ella mientras enciendo el carro— ¡Ah! —grita fuertemente— ¡Me duele!

—Cuando le dije a la empleada que tu parto era para hoy, no lo decía literalmente —susurro para mí mismo y tomo una larga bocanada de aire.

Y así continúa el trayecto hasta llegar al hospital.
Bien, querido pequeño. Tu día ha llegado.