Textos para nosotro/as

¿Te sientes identificado?

Si, a mi también me pasa. A veces estoy triste y con ganas de llorar, aunque me pasen cosas buenas. He llegado a un punto en el que siempre estoy triste. Si, para los que me conocen en persona sabrán que siempre estoy sonriente, pero no todas las sonrisas son verdaderas. A veces sonrío para que no me pregunten que me pasa, ya que no quiero que se preocupen por mi. Prefiero guardar mis problemas para la noche, y ahí es cuando interviene el insomnio. Lloro toda la noche, y le cuento mis problemas a la pared, porque sé que aunque se los cuente, no se va a preocupar, y quizás no me dé consejo, aunque ya ni siquiera me escucha, pero me alivia mucho poder llorar sin que se preocupen por mi. Si algún día me conocieras en persona, tú, el/la que está leyendo esto, verás que siempre estoy sonriendo. Siempre con mil sonrisas por fuera, y mil batallas por dentro. Tengo amigos (pocos) y me apoyan, pero a veces me reservo cosas. No se lo cuento todo, porque sé que si les empiezo a contar cosas, lloraré sin poder evitarlo, y no es por orgullo, pero prefiero yo llorar delante de nadie. Prefiero llorar debajo de mis mantas, por la noches, con clinex al lado, y recordando cosas malas... Cosas que no se te borran de la mente... Y así hasta que por fin te quedas dormida. Con lágrimas en los ojos. Y al día siguiente, me levanto, me lavo la cara, y sonrío, como si nada hubiera pasado. -A