||One Shots|| [MikoRei]

Las 5 cosas que odio de ti

Título: Las 5 cosas que odio de ti.
Anime: K-project.
Pareja: Suoh Mikoto x Munakata Reisi.
Género: viñeta, angst, romance.
Notas: este tipo de fics siempre me ha gustado, y quería hacer mi propia versión con mi pareja favorita~
Notas(2): si no has visto el final del anime, no lo leas.

  No era como si Munakata Reisi odiara todo de Suoh Mikoto, incluso aunque no lo admitiera, el pelirrojo le caía bien –demasiado bien incluso- y se ganaba su simpatía; aunque sí que habían varias cosas que llegaba a odiar con toda su alma:


Lo primero que odiaba era su carácter tan violento y explosivo, porque era una verdadera molestia reparar los muchos daños que causaban sus llamas, interfiriendo siempre en su rutina diaria en el SCEPTER4.

Lo segundo era su amabilidad, pese a su fiera apariencia, el Rey Rojo era un hombre amable, dispuesto a hacer todo y más por sus amigos; además de que HOMRA parecía un centro para jóvenes perdidos, o Mikoto tenía el hábito de aceptar allí al que quiera unirse.

Otra cosa que odiaba era su calor, bastaba estar cerca de Mikoto para comenzar a sudar; ardiente, su cuerpo era simplemente ardiente y transmitía una sensación casi sofocante, ni hablar de cuando le abrazaba más de una vez sentía su propio cuerpo prácticamente derretirse entre sus firmes brazos.

Lo cuarto eran sus ojos, se asemejaban a la mirada penetrante de los grandes felinos, un solo vistazo era capaz de hacerle temblar, pareciendo que le devoraba con los dos pedazos de oro que eran sus ojos.

Por último: su voz, esa voz tan grave y profunda le crispaba los nervios; le costaba mantener su compostura cuando le hablaba sin apartar la mirada, observándole en todo momento.

Claro que todo esto tenía una razón, ¿por qué odiarlo tanto sino? Sencillo... porque nunca más lo volvería a ver, por mucho que lo deseara.


"Lo siento por hacer que hagas el trabajo sucio, Munakata"


Con esa frase supo que ya no tendría que hacer horas extras en su trabajo, sin Mikoto no había daños que reparar en la ciudad.

Supo que no volvería a ver la cálida sonrisa del pelirrojo cuando hablaba de los chicos de HOMRA, los cuales eran casi como su familia.

De igual manera supo que su cama a partir de ahora estaría siempre fría... fría y gélida puesto que los cálidos brazos de Mikoto no le rodearían de nuevo.

Supo también que su cuerpo no volvería a estremecerse ante nadie, pues nadie tiene esa mirada tan penetrante que tenía el Rey Rojo.


Y tuvo muy claro que ninguna otra persona sería capaz de hacerle temblar con simplemente decir su nombre... más bien, su apellido, Mikoto jamás le llamó Reisi, y jamás lo haría.
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