[EunHae] Arrepentimientos

Capítulo 5

Decidí comprarme un Teléfono nuevo ya que en el presente vivir sin celular era terrible, además iba a empezar a trabajar pronto por lo que necesitaría algo con lo que comunicarme si llegaban a suceder cosas imprevistas.

Quise aprovechar mi último fin de semana conociendo más de la ciudad, era algo diferente a lo que estaba acostumbrado. El cambio de lengua, costumbres y cultura se me hacía difícil de asimilar, quería tomar mi libertad repentina como una completa novedad, sin embargo muchos sitios aquí no inspiraban confianza.

Entre a un bar cómodo, no parecía demasiado vulgar, habían varias personas en el sitio tomándose un trago.

Mi plan no era emborracharme, aunque un poco de licor no me iba a caer mal.

La ventaja de haber cambiado mi número era que evitaría los mensajes y las llamadas insistentes de Eunhyuk. Aun no era capaz de asimilar con seriedad la idea de un divorcio, sabía que tomar decisiones con rencor no estaba bien. Sungmin tenía razón en decir que debía pensar las consecuencias de mis decisiones, Hyuk se había equivocado, me había engañado debido a una inseguridad tonta. Por supuesto yo fui el más herido en todo el asunto ¿Quién espera encontrar a su esposo en los brazos de una zorra cuando regresa a casa?, nadie claro está.

Pensar en el pasado solo causaría que me deprimiera, estar alejado de él me ayudaría a ser una persona independiente, la persona que era antes de poner el mundo a sus pies. Muchos matrimonios tienen problemas, aproximadamente un buen porcentaje por infidelidad, en la mayoría de los casos el divorcio es la primera opción.

Aunque sonara masoquista seguía amándolo, precisamente eso me detenía ante la idea de darle la completa libertad.

Porque a pesar de todo el seguía siendo mío así como yo seguía perteneciéndole.

La cruda realidad

El cantinero trae una copa del vino que he pedido, apenas son las tres de la tarde por lo que no pienso gastar el resto del día en este lugar. Simplemente estoy familiarizándome con la zona, era un turista en busca de aventuras emocionantes. Al menos eso era lo que algunos hombres pensaban al verme solo en una mesa.

Sentía miradas sobre mí, no puse atención a ello, me concentre en mis planes futuros, en lo que pasaría si regresaba a mi país para ver a mi hermano y a mi madre.

Era seguro que Eunhyuk me perseguiría hasta el fin del mundo.

La sola idea de que me encontrara me causaba escalofríos, no estaba listo para volver a verlo

- Otra botella por favor

La voz se me hizo familiar, mire detenidamente hasta que lo encontré. Se trataba del pequeño que había discutido con mi futuro jefe, no se veía nada estable sus mejillas rojas y sus ojos llorosos eran la clara prueba de ello.

Un hombre se le acercó.

No parecía tener buenas intenciones

- Oye guapo-le indico aquel hombre, Ryeowook lo miro sin interés

- ¿Qué quieres?

- Hacerte compañía por supuesto ¿Por qué tan triste?

- No tiene nada que ver contigo, si no te importa me gustaría estar solo, gracias-había sonado demasiado cortante, me sorprendí ya que parecía una persona sensible. Aquel tipo se alejó con cara de pocos amigos, me levante de mi lugar y me senté a su lado en la barra, tenía el número de Jong Woon por seguridad así que era conveniente llamarlo si la situación se complicaba un poco.