En Busca del Amor #2

Capitulo 1

No escuchaba nada de lo que me decía la guía universitaria, pues estaba algo distraída mirando hacia todos lados para ver si me encontraba con el rostro de Adam, pero para mí mala suerte eso no sucedió. Luego de un rato de estar merodeando, llegué hasta la habitación que me habían asignado a mí y a Coral, ambas quedamos juntas y eso me hacía inmensamente feliz.

-pueden dejar sus pertenencias aquí, y luego pueden bajar a tomar sus horarios. -nos indicó la guía.

-gracias. -le respondimos al mismo tiempo.

La guía se fue de la habitación y ambas comenzamos a desempacar. Escogimos nuestras camas y me acosté por un momento. Todavía tenía un nudo en la garganta por los nerviosa que estaba.

-tienes que relajarte Alaska.

-se me notan demasiado los nervios

-sí, así que por favor tranquilízate.

Bajamos con Coral para que nos entregaran nuestros horarios de clases, luego nos fuimos a la biblioteca, un lugar bastante maravilloso. Era como estar en el paraíso (bueno para las personas que aman la lectura, comprenderán lo que quiero decir). Luego de visitar la biblioteca con Coral entramos a la cafetería, la cual también era gigantesca y tan maravillosa como la anterior.

Estuvimos con Coral mirando toda la universidad y para ser sincera estaba muy feliz y me encantaba cada detalle que veía en el lugar.

-Debo ir a la cafetería que me dijo mi hermano. -le dije a mi amiga.

-él hablo con su amigo

-si, dijo que antes de darme el trabajo quería conocerme, y como lo necesito con urgencia lo mejor será que vaya lo antes posible.

- ¿Qué paso con tu mamá Alaska?

-la verdad no lo sé, ella me dijo que iba a ayudarme con el pago de la diferencia que no cubre la beca, pero dada la situación entre ella y yo, no creo que eso suceda, así que es mejor que encuentre un empleo lo antes posible.

-entonces tendremos que ir. - le tomo el brazo a Coral y ambas comenzamos a caminar.

-mi hermano me dio la dirección. -Coral ingresó la dirección en una aplicación que tenía su teléfono y le apareció la ruta.

Hice parar un taxi y Coral subió primero que yo, luego le dio la dirección al taxista y nos fuimos rumbo a la cafetería, pero antes de que el taxi iniciara su viaje, Alaska miro a través de la ventana y se quedó en shock. No daba crédito a lo que veía, luego de tanto buscar, el objeto de sus deseos apareció frente a ella, pero al parecer Adam no la vio.

-¿Alaska te encuentras bien? -miré a mi amiga y asentí con la cabeza.

Me quede en silencio, por más que Coral me hablaba no logré prestarle atención y atiné a asentir con la cabeza a todo lo que decía, realmente no tenía ganas de hablar. Sólo pensaba en Adam, lo vi muy bien acompañado y también muy feliz. Pero no quería sacar conclusiones equivocadas, pues puede ser una compañera de universidad y nada más.

Con Coral llegamos a la cafetería de la que me habló mi hermano Miguel, así que entramos para preguntar por Rynardo. El lugar estaba abarrotado de gente, se notaba que era muy popular. Nos acercamos al mesón donde estaba atendiendo un chico.

- ¿Qué se les ofrece?

-Hola... sabes, estoy buscando a Rynardo. -yo lo miré y él me sonrió.

-y ustedes son...... -nos miró a ambas.

-mi nombre es Alaska y vengo de parte de mi hermano Miguel, él me dijo que hablar con Rynardo. -el chico volvió a sonreír, no sé cuál era la gracia.

-bueno.... yo soy Rynardo. -ahora yo era la que estaba sonriendo, mire a mi amiga Coral disimuladamente y ella también sonrió, creo que ambas pensamos que el chico teníamos enfrente era muy apuesto.

-Miguel me contó que se había encontrado con su hermana, pero no sabía que su hermana era tan linda. -yo lo miré y obviamente me sonrojé, me tomó totalmente desprevenida.

No sabía que aquí la gente era tan directa, no tienen problemas en decir las cosas que piensan, ya sean buenas o malas.

-él me conto que su hermana vendría a estudiar aquí, y que necesitaría algo de trabajo, por eso he guardado un puesto de camarera para ti.

Cuando la conversación se volvió más profesional comencé a relajarme, así que comenzarnos del trabajo. Coral dijo que saldría a caminar por los alrededores para conocer más el lugar mientras yo conversaba con Rynardo sobre lo que tendría que hacer y la paga que recibiría.

-Te parece bien todo. -yo estaba muy contenta.

-sí, me parece super.

-bueno si te parece bien, puedes comenzar a trabajar el día lunes, por mientras esta semana te orientas con el lugar y tu universidad.

-Eso estaría de maravilla. -salí de la cafetería y llamé por teléfono a Coral.

- ¿Dónde estás?

-Alaska, quédate donde estas y no voltees.

-¿de qué estás hablando?

-Sólo hazme caso por favor, ¡No voltees! -comencé a sentir un poco de pánico por lo que decía Coral, pero justamente cuando me dicen que no haga algo, reacciono de la manera contraria.

Me quede congelada y mi teléfono se cayó de mis manos, mis lágrimas comenzaron a caer y mi boca comenzó a tiritar, había esperado un año, he viajado por muchas horas, he buscado un trabajo para poder quedarme aquí, pero todo lo que hice se fue a la mierda cuando vi con mis propios ojos a Adam con una chica, pero no estaba conversando con ella, más bien ambos se estaban besando.

Puse mis manos en mi boca ya que no quería que me oyeran llorar, me costaba en ese momento tragar saliva, mis manos temblaban, solo quería desaparecer en ese momento. De repente siento que alguien me toma del brazo y me voltea, y termino chocando mi cabeza con el pecho de aquella persona.

-Tranquila. -no sabía quién era la persona, pero no me importaba, solo quería salir de ese lugar. -vamos. -antes de caminar, la persona tomo mi teléfono y entramos a la cafetería otra vez. -sé que nos conocemos hasta hace un momento atrás, pero creo que viste algo que no te gusto. -yo estaba en silencio, solo quería llorar por ser tan tonta. -ahí viene tu amiga.

Yo miré a Coral que venía rápidamente hacia mí, ambas nos abrazamos y yo comencé a llorar con más fuerza que antes.

-Tranquila Alaska....

-Soy una tonta Coral......realmente pensaba que él no tenía a nadie, cuando me preguntabas que pasaría si eso resultaba cierto, siempre te respondía con mentiras, me duele demasiado Coral, me duele mucho.

-tranquila Alaska...todo tiene una explicación.

-No Coral, él tiene novia, el único mal tercio aquí soy yo. -tome un poco de agua, que me había traído Rynardo. -idealice una situación que nunca iba a pasar, soy tan estúpida.

-¡Ya para de una vez! -me grito Coral. Ella nunca me grita y eso me sorprendió mucho de ella. -te estas volviendo paranoica, solo escúchame lo que tengo que decirte, y no comiences a imaginar cosas raras. Así que no me interrumpas cuando te lo diga. -yo la miré y asentí con la cabeza.

-Sí, tú viste que ambos se estaban besando, pero no alcanzaste a ver después que Adam alejo rápidamente a la chica y luego se dijeron unas pocas palabras, la chica comenzó a gritarle y decirle que era una mierda y muchas cosas más, Adam solo la miró y ella le dio una cachetada.

- ¿En serio?

-Si Alaska, definitivamente esa chica no es su novia.

Creo que después de escuchar a Coral me tranquilice un poco más, pero no del todo. Aún tengo dudas, a veces pienso que estoy en el lugar equivocado, buscando un amor que ya no puede corresponderme.

Como siempre, espero que le guste el capitulo. No olvidar de comentar de votar en el.

Y espero que este nuevo libro, les guste como fue el primer libro de esta maravillosa historia. Saludos a la distancia y abrazo virtual.

Misy H.