La vida de Jessamine había cambiado por completo desde que el millonario Tony Stark la habia sacado de su prision congelante, habia luchado contra un robot que quería destruir al mundo, habia vuelto a la vida y descubierto nuevas habilidades y una f...
Jessamine sentía el calor y la suavidad de las sabanas y un cuerpo que la abrazaba, sintio ligeros besos en su mejilla, cuello y oreja que la despertaron, abrio los ojos lentamente encontrandose con un despertador que marcaba las 9:36 a.m
-mi amor-susurro alguien detrás de ella, rodeandola con los brazos por la cintura y acercandola a él-buenos días-Jessamine volteo hacia atrás, encontrandose con los azulados ojos de Pietro mirandola con una sonrisa-hola-Jessamine parpadeó varias veces antes de tocar el rostros de su esposo con cariño
-Pietro-murmuró mientras este apoyaba su rostro en la mano de Jessamine
-estas bien?-Pietro fruncio el ceño mientras acariciaba el cabello de Jessamine con cariño
-creía que...-Jessamine no pudo terminar porque un ligero sonido, proveniente de un pequeño radio a lado de ella la interrumpió, era un lloriqueó de bebé, Pietro sonrió ligeramente
-esta despierto-murmuró mientras besaba fugazmente la nariz de Jessamine-te parece si hago el desayuno y tu vas con el?-Jessamine tragó en seco antes de asentir ligeramente, Pietro se saco las sabanas de encima y salió de la cama en boxers-no tardes-dijo con una sonrisa antes de salir de la habitación, Jessamine miro a su alrededor mientras se levantaba, la habitación era grande y moderna, hecha de madera un candelabro de luz colgaba en medio del techo, y enfrente a ella había una chimenea de piedra lisa, con una pantalla plana apagada, justo encima, Jessamine no sabía donde estaba, pero dentro de ella había un paz y tranquilidad que la llenaba, el ruido se volvio a oír desde el monitor, esta vez más insistente, entonces con prisa Jessamine salió de la habitación encontrandose en un pasillo de madera en el habían dos puertas más una en medio y otra hasta el fondo y de este Jessamine pudo escuchar los lloriqueos, se acerco a paso rápido hacia él antes de abrirla y encontrarse con una cuna blanca justo debajo de una ventana, la habitación era como la anterior solo que está tenía un muebla pequeño, y una silla mecedora aún lado de la cuna, el bebé lloraba mientras Jessamine se acercaba a el y lo miraba, no tenía más de un año, con unos cabellitos blancos, sus mejillas regordetas estaban llenas de lagrimas y ruborizadas y su piel dorada como oro derretido, las extremidades de Jessamine temblaban mientras tomaba al bebé en brazos y lo miraba facinada mientras los mecía tratando de calmarlo, lo que funciono, el bebé dejo de llorar y abrió sus ojos por completo mirandola con un intenso y hermoso color azul, como su padre, el bebé tomo un mechon de Jessamine entre su manita mientras sonreía sin ningun diente, Jessamine rió ligeramente con lágrimas en sus ojos, su bebé, su pequeño hijito estaba entre sus brazos sonriendole con ternura
-es hermoso-dijo una voz femenina detrás de ella, Jessamine volteó y sintio el frío colarse en sus huesos cuando miro aquellos carbones ardientes mirandola con una sonrisa, Jessamine trato de mantener a su hijo entre su pecho, protegiendolo pero cuando volteo a mirarlo este ya no encontraba en sus brazos, volvió a mirar hacía el frente y sintió un retortijón en su estómago cuando vio al bebé en sus brazos la mujer sonrió, antes de poner un dedo en sus labios con cenizas emanando de ella
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