Un Bebé En El Área (Newt y tú) CORRIGIENDO ORTOGRAFÍA

3. Nueve

-Uno... Dos...-antes de que mi hermano pudiera llegar al tres, una alarma comenzó a sonar y la luces se apagaron.

-¡La guardia se fue!-escuché reclamar a Minho, mientras aún intentaba acostumbrarme a la repentina oscuridad-¡No sé dónde esta!-tan pronto como terminó de decir aquello, el estallido de una granada se escuchó y el lugar se iluminó brevemente por los rayos de electricidad, lo que me permitió divisar una figura borrasa que huia de nosotros-Es mi culpa-balbuceo Minho.

-Vuelvan a sus puestos-ordenó Thomas-Busquen la rendija por donde se abren las puertas. Voy a usar la tarjeta de la Rata. ¡Prepárense!

Pocos segundos después, se escuchó como la puerta comenzaba a abrirse.

-¡Disparen!-gritó Minho.

Todos comenzamos a disparar a la habitación.

-¡Deténganse!-exclamó Thomas arrojando su arma al suelo-¡No gasten más municiones!

Todos nos detuvimos, y esperamos que la energía cediera para poder entrar sin peligro.

-Estamos un poco escasos de recuerdos. ¿Sabes algo que podría ayudarnos? ¿Dónde están todos? ¿Qué fue esa alarma?-le preguntó mi hermano a Brenda, ella negó con la cabeza.

-Tengo que ser sincera, algo muy raro está ocurriendo.

-¡Seguro es otra de sus malditas pruebas!-exclamó Newt a gritos-Todo esto estaba armado y nos están observando otra vez.

Thomas cruzó la puerta y nosotros lo seguimos.

Pocos segundos despues, la alarma se detuvo.

-¿Qué...? ¿Y ahora qué?

-Es probable que se hayan hartado de escuchar ese ruido. No significa nada que lo hayan apagado-respondió Minho.

La poca luz que había de los rayos de electricidad se extinguiron, pero la habitación no quedo a oscuras porque tenia luces de emergencia. Quedó inundada de una tenue luz roja.

La habitación era bastante grande, tenía sillones, sofás y un par de escritorios. Pero no había nadie a la vista.

-Nunca he visto gente en estas salas de espera. Este sitio está totalmente vacío y me da escalofríos-comentó mi hermano.

-Estoy segura de que hace mucho nadie entra aquí-repusó Brenda.

-¿Y ahora qué hacemos, Tommy?-preguntó Newt-No podemos permanecer todo el día aquí-Thomas pensó unos segundos antes de responder.

-Muy bien. Brenda, realmente necesitamos tu ayuda. Tenemos que ir a buscar a los bebés, luego debemos ir al hangar, encontrar a Jorge y decirle que vaya preparando el Berg. Newt y Minho pueden quedarse con él como fuerza de apoyo, Brenda y yo vamos a examinar el área para encontrar a nuestros amigo, ______ puede quedarse con ustedes con los bebés, no quiero que les ocurra nada. Brenda ¿Sabes dónde podemos aprovisionarnos de armas?

-El depósito está camino al hangar. Pero seguramente habrá vigilancia.

-Hemos pasado por cosas peores-bromeó Minho-Les dispararemos hasta que caigan ellos o caigamos nosotros.

-Pasaremos por encima de esos guardias. Hasta el último de esos malditos-agregó Newt.

-Es por ahí-Brenda señaló uno de los pasillos.

Ella salió y comenzó a caminar, todos la seguimos, atentos a cualquier cosa que pudiera pasar

-¿Estas bien?-preguntó Newt llegando a mi lado, tomandome de la mano, la que no tenía el arma.