20:30 pm.
–No, no pude ir hoy. Hubo un problema en mi casa pero mañana si voy y te conozco ;)
–¿Estas bien? ¿Algo en lo que te pueda ayudar?
–Estoy bien, gracias.
Perfecto. No había pasado nada tan malo excepto el no saber quién era. La curiosidad me consumía, reconociendolo soy una persona demasiado desesperada pero la mayoría de los que me rodean ya se habían acostumbrado.00:28 am.
Mi día terminó igual que todos los demás justo a la hora en la que me encantaba dormir porque era más que encantador dormir tarde y levantarse aún más tarde. Grey y yo seguiamos haciéndonos preguntas sobre cómo somos, como habíamos sido, que nos gustaba, que nos gustó y un sin fin de cosas que me hicieron quererle más. Por fin me dijo que está vez si iría a la escuela por lo que me emocioné aunque después me cuestioné ¿En verdad lo quería? ¿Ya había llegado a dicho sentimiento hacia él?. Miles de dudas invadieron mi mente, lo que me provocó que no durmiera durante al menos una hora.
01:34 am
Logré dormir al fin. Las cobijas ya me habían calentado y la oscura noche me arrulló tanto que no quedó otra opción.
Al siguiente día me desperté algo tarde (más de lo común) y me bañé de lo mas rápido posible. Hoy sería el día. Muchos dirán que es algo emocionante y otros dirán que no, pero la verdad es que para mi fue una de las cosas más esperadas en mi vida, tanto que mi mamá me noto con una gran sonrisa en la cara y cuestionó el porqué. No tenía palabras para explicar mi felicidad así que sólo le dije que había dormido bien.
Llegué a la escuela, deje mi mochila en mi asiento y fui a la espera en la puerta. Pasaron millones de chicos y me entusiasmaba el imaginarme quien era.
Una mano tocó mi hombro y voltee a ver de quién se trataba. Desgraciadamente no era quien pensaba, era Belén que se acababa de llegar.
–Me espantaste– dije.
–Así has de tener tu conciencia– dijo entre risas.
–Estaba esperando a Grey.
–Mariah, ¿No te parece que estás exagerando en buscar al tal Grey?
–Tal vez un poco, pero es que en verdad quiero saber quién es. Él me conoce a mí pero yo no a él.
–Por el amor de Dios ¿Crees saber quién es? Y ¿Si es una broma?
–¿Y si no?
–¿Y si si?
– Te juro que nunca había estado esperando conocer a alguien.
– Esta bien te dejaré que lo conozcas.
–Por eso te quiero– finalicé.10 minutos de espera parecían mucho pero al fin llegó. Un chico de cabello castaño, ojos color café con unas hermosas pestañas, una estatura media, algo delgado pero parecía suficiente para pensar que era lindo. Sus pasos se dirigían en dirección a mi y con una voz suave empezó muestra conversación.
–Hola Mariah
–¿Tú eres Grey?
–Exactamente. Es algo difícil de pensar pero es así– dijo sonriendo.
Habían millones de cosas que había estado esperando pero esta no se comparaba a las demás.
Era maravilloso el conocer a alguien que piense casi igual a ti mismos gustos entre millones de cosas. La campana de la primera hora sonó, obviamente los dos teníamos que entrar a clase no teníamos alguna otra opción pero después de esa entrada y choque de palabras con él resultaría algo bueno para empezar el día.
Aproximadamente 4 horas de estudio y la salida al receso era demasiado esperada. Nunca supe el porque me gustaba salir temprano si siempre terminaba sin hacer algo en mi descanso. Platicaba a gusto con Belén y Diana cuando Grey apareció por atrás saludando. Por mi cuenta, aprecie que era un chico demasiado lindo y a pesar de lo que pasaba entre Eduardo y yo podría decir que Grey había causado algo en mi, algo inexplicable pero lindo.
Entramos de nuevo a clases y entre las 3 horas que faltaban me apresure para salir temprano y llegar pronto a mi casa: la misma rutina de siempre esperaba por hacerse y no podía faltar obviamente. Era increíble lo que Grey pudo hacerme pasar este día tanto que me dibujo una gran sonrisa. Siempre había esperado conocer a alguien más que no fuera de mi salón o que mis amigas conocieran, tal vez no lo conocí por mi propia cuenta, pero era una persona maravillosa que yo esperara se quedará conmigo siempre...
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Un Amor Imposible
Teen FictionMe miró cuando nadie más lo hizo. Al voltear mi mirada él parecía el hombre perfecto. Una rosa, una carta... Conversaciones que duraban horas sin aburrirnos. Estar a su lado completaba mi día. Amarlo, completaba mi vida. Esta historia es basada en...