Capitulo 6: JUEGO DE MANOS

34 5 0
                                    


-Me gusta ese actor, hace sentir sus emociones y todo a través de una pantalla-

Era gracioso como Elizabeth se hacia la intelectual, el tipo solo estaba bebiendo agua.

Aquella chica me agradaba a pesar de todo, pensándolo bien, ella no tenía la culpa de nada, simplemente no quiso meterse en problemas y pudo haber tenido miedo de que John le hiciera algo si me decía todo lo que pasó, después de todo, ella confió en mí desde un principio, no era mala persona, era algo tonta, pero buena.

Lisette quizás hizo lo mismo, le siguió el juego a Benjamin y a John.

Michelle solo trataba de ayudar.

Era inevitable preguntarse y tratar de deducir quien era realmente el cabecilla de toda la situación.

Que bellas piernas tenía Elizabeth.

-¿Qué tal tu día?- pregunté.

-Mm, bien supongo-

-Ah-

Esa chica no cooperaba, no nacía conversación, no podía tratar de hallar un lapso para poder comenzar a jugar mis cartas. Debía decir algo o hacer conversación de algo, para poder sostener una confianza del momento, pero aun así nada podía fluir correctamente.

Tenía que relajarme, estaba muy tenso.

-Elizabeth voy al Baño-

Camine lo más lento posible pero era imposible no parecer nervioso, si me notaba así entonces sabría que estaría vulnerable.

Enjuagué mi cara y mojé un poco mi pelo, me mire en el espejo para notar si existía la presencia de alguna imperfección estética, pero nada fuera de lo común.

Estaba listo para volver a ver la película, ya relajado y dispuesto, pero al voltear mi cabeza hacia la puerta y fijarme en aquella figura afirmada sobre el marco no me dio la oportunidad ni de desviar la mirada, quería mirar.

-Hola- dijo.

Estaba desnuda en la puerta del baño, no pensé que ella fuera a dar un paso así, pensé que eso no pasaría más allá que un juego de manos, pero al parecer podía alcanzar más.

Me acerqué a ella, y comencé a besarla locamente, toma sus manos y las puse en su espalda mientras la acorralaba sobre el marco de la puerta, mi cuello mojado rozaba con el suyo a medida que los besos aumentaban intensidad.

Nuestros cuerpos cada vez más cerca y ella comienza a levantar mi polera, me tocaba, me hacia caricias.

Mientras nos tocábamos y nos besábamos como dementes, terminamos en su sofá, ella bajo mi pantalón con mucha delicadeza pero muy veloz, cual ave pudo surcar mejor los cielos estrellados y hacer un recorrido mas allá de este mundo, dando vueltas por los lunares en mi pecho y alrededor de mi cuerpo.

Era como si le gustara, se sentía como algo más que lujuria.

El cálido abrazo de sus labios mojados hacia que mi sangre hirviera, el mismo infierno se desataba en mi interior, pero por primera vez me gustó.

Luego de un rato, nuestros cuerpos se enfriaron, nos abrazamos y dejamos que todo pasara.

Mi teléfono iluminaba en la oscuridad de la noche, era mi madre que estaba llamándome, perdí la noción del tiempo.

Me dejo un mensaje de voz.

Fuimos a la habitación de Elizabeth

Escuché el mensaje y deje que mis parpados cayeran lentamente mientras acariciaba su cabeza posada en mi pecho.

'Elizabeth me dijo que verían una película, ella es una buena chica, cuídate mucho por favor, al parecer te quedarás allá, espero tengas muy buenas noches, Te Amo Hijo'.

A la mañana siguiente, el sol iluminaba nuestros rostros, ambos despertamos y nos besamos una vez más, debíamos ir a la escuela pero aquella cálida sensación en mi hacia que mis deseos se enfocaran en esa mujer y su cama, era el momento perfecto.

-¡Elizabeth¡-

Su madre abrió rápidamente la puerta, dejándome sin oportunidad para esconderme en caso de que fuera necesario.

Ella nos miró y cerró la puerta.

Cuando volví a tener conciencia de la seriedad del asunto, ya tenía el foco sobre mí, literalmente.

-¿Qué intenciones tienes con mi hija? ¿Se cuidan? ¿Qué numero de vez es esta?-

Tantas preguntas y ninguna con una respuesta concreta, era bastante incomodo. La palabras saliendo de la boca de Elizabeth me revolvieron el estomago.

-Somos novios mama-

-Ah, está bien, tan solo cuídense, es normal todo esto en su edad, ahora vallan a la escuela, van muy atrasados-

Nos arreglamos y partimos, no dijimos ni una sola palabra en todo el camino, además su madre nos fue a dejar.

Caminamos por los pasillos del edificio y llegó el momento de separarnos, ella me toma de la mano, me besa y me dice al oído.

-Adiós, novio-

Desde aquel momento fuimos inconscientemente novios.

Entré a mi sala de clases, John, Benjamin y Dante me miraron y sonrieron.

-Señor Willcox, ¿Por qué tan tarde?-.

-Disculpe profesora, me quede dormido, que buena película la de anoche-.

Psychopath.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora