Comienzo de la peor trajedia

443 21 0
                                    

- Ty, ya despierta, tienes que ir a la escuela, cariño.
- No mamá, no quiero.

Adivinen ¿quien se despertó tarde y tiene que hacer todo a las corridas?
Son las 7:30 am, hoy es lunes. Mi primer día de escuela, estoy nerviosa, no se con que me voy a encontrar, no se como me recibirán, no se como será la forma de estudio, no se absolutamente nada.

Luego de ducharme opto por vestirme con mi jean preferido. Mis borsegos negros, una remera blanca y mi pañuelo bordo.

-Hija, baja a desayunar que ya es tarde.

Tomo mi abrigo, la mochila y bajo las escaleras para dirigirme a la cocina. Mamá me esperaba con café y tostadas. Desayuno mientras me recojo el cabello en una coleta alta y desprolija. Le pido a mamá que me desee suerte y ella lo hace, agarro el celular, entro al reproductor y pongo Bohemian Rhapsody de Queen, me abrigo, me cuelgo el bolso y salgo hacia el garage para tomar mi bici.

Camino por los pasillos, en silencio, con la mirada al frente buscando el salón 4. En estas primeras tres horas tengo literatura.

-Buenos días señorita, ¿como es su nombre?- me pregunta la profesora.
- Buenos días, disculpe la interrupción profesora, mi nombre es Tyra Montgomery. - le respondí en voz un poco baja.
- Tome asiento, pero antes de hacerlo recite un poema como castigo por la tardanza. - me dijo ella con mirada desafiante.

De pie al lado del pupitre y con mis cosas apoyadas en él comencé a hacer lo que me había pedido.

- Quiero que sepas
Una cosa
Tú sabes cómo es esto:
Si miro
La luna de cristal, la rama roja
Del lento otoño en mi ventana,
Si toco
Junto al fuego
La impalpable ceniza
O el arrugado cuerpo de la leña,
Todo me lleva a ti,
Como si todo lo que existe,
Aroma, luz, metales,
Fueran pequeños barcos que
Navegan
Hacia las islas tuyas que me
Aguardan.

- Hasta allí está bien señorita Montgomery- me frenó ella un poco sorprendida por mi actuación. - puede tomar asiento.-

Tomé asiento y abrí el cuadernillo en la página que indicaba lo anotado en la pizarra. Giré mi cabeza hacia mis costados y vi a todos mirándome y riendo. Me sonrojé e inmediatamente volví la vista hacia los apuntes.

¿Cómo es posible que ellos se estuvieran riendo y yo no lo hubiera notado? ¿Cuál era el motivo de sus risas? Cuando recité el poema en lo único que pensé fue en recordarlo para decirlo tal y como es. ¿Abré dicho algo mal? Quizás por los nervios me salió mal, ¿Por qué se ríen?

Cuando menos me di cuenta la clase ya había terminado. Al salir del salón la profesora me felicitó pero, no todo es bueno ¿no?

- Gorda fracasada.- me doy la vuelta y una hermosa chica rubia se ríe con sus amigas de su comentario.

Las clases transcurren normales, por suerte no volví a cruzarme con Hanna, la rubia que me insultó.

A la salida de la escuela voy a buscar una academia de baile para continuar con lo que empezó en Argentina. Olvidé decirles eso. Soy bailarina contemporánea desde niña. Es mi escape del mundo, bailando puedo expresarme sin que nadie me pida explicaciones. Puedo ser libre, puedo sentir que mi cuerpo llora. O tal vez salta de la alegría. Siento que vuelo, que bailó sobre las nubes. Siento que no hay límites, ni alguien que me controle. Siento que llueve en mi interior, que todo se limpia, se purifica. Siento que vuelvo a nacer en cada paso.

Busco por internet, hasta que una llega a convencerme, queda cerca de casa, a unas 20 cuadras. Así que me dirijo hasta el lugar en mi bicicleta.

Ingreso, le pregunto a una chica joven de unos 22 años, el precio de las clases, los horarios y cuando podía comenzar. Ella me respondió que podría comenzar de inmediato así que le envié un mensaje de texto a mi madre y entre al vestidor para colocarme mi fusso y mi maya.

Día a día ese nudo en mi interior crece, quizás sea complicado que alguien llegue a conocerme con lujos y detalles. Con presente y pasado inclusive. Pero tengo fé y no pierdo las esperanzas. Alguien estará ahí para mi.

Muerte De Mi InocenciaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora