Marinette y Adrien son dos chicos de secundaria normales con el mejor secreto del mundo: dobles identidades. Al tener un corazón noble y la mente abierta se les fue asignado una gran comisión: poseer un miraculous para ser súper héroes y rescatar a...
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Narración Adrien
Sus ojos azules eran más perfectos que nunca, brillaban como el Sol y me gustaba verme en ellos. Fue inevitable el tomar su mejilla y acariciarla despacio mientras la acercaba a mí lentamente, sentía muchos nervios y estaba más tímido que nunca, pero algo me decía que con ella soledad era lo que iba a sobrar. Cerré mis ojos y la besé.
La alarma sonó y abrí los ojos, sólo fue un sueño.. con Marinette. Miré hacia mi ventana, era un día lluvioso. Me levanté y me acerqué mirado la ciudad bajo las nubes grises y la lluvia y me preguntaba sí es que ella miraba lo mismo que yo, en qué estaba pensando.. y luego pensé en Ladybug. Este camino que tomaban las cosas no sabía a donde me llevaban, y me preocupaba en realidad. Bajé del coche con un paraguas, y traía puesta la bufanda que mi padre me había regalado de cumpleaños. Marinnette venía corriendo cubriéndose de la lluvia cuando resbaló. No dude en acercarme, y la ayudé del brazo a levantarse.
Adrien: ¡Cuidado! ¿Estás bien? .- Le pregunté y choqué con su mirada, era como en mi sueño.
Mari: Sí, estoy bien..gracias Adrien.
Sonreí al verla y recordé mi primer día de clases, un día lluvioso como aquél y estaba con ella de nuevo. Le extendí mi mano con el paraguas, y la miré fijamente. Quedé eclipsado y por un momento no supe que decir. Ella tomó del mango y caminamos en silencio hasta llegar al salón, algo secos gracias al paraguas. Ella tomó su lugar y yo el mío, y lo único que gritaba mi mente era su nombre.
"Si tan sólo estuvieras aquí..." pensé y el rostro de mi madre apareció en mi cabeza. Suspiré, estaba seguro de que ella podría ayudarme en ésto, no sabía que dirección tomar, una parte de mí quería a Marinnette, pero también a Ladybug, pero otra de mí temía a amar en vano.
"Adrien y Marinnette", alcé mi vista al escuchar la voz de la maestra y negué rapidamente.
Adrien: Ella no hizo nada maestra, es mi culpa.
Todos se echaron a reír y miré a los lados, no estaba comprendiendo la situación, así que miré a Nino quien me negaba suavemente y tenía su palma en su frente.
Nino: No viejo, te tocó con Marinnette para el trabajo de ciencias, es en parejas.
Sonreí, y volteé a ver a Marinnette que me miraba pero desconcertada. Tal vez era mi oportunidad para aclarar todo, con ella y conmigo. Aunque no estaba muy seguro de qué aclarar, pero no podía seguir así. Empezaba a darme cuenta que necesitaba estar bien con ella, no importaba si no habláramos todos los días, o si no saliéramos juntos todos los días, ella parecía ser el armador de mi vida, desde el día que tramamos amistad, ella fue mi amuleto de la suerte, mi lucky charm diría alguien más.
Al término de clases esperé a Marinnette en la salida, aprovecharía el proyecto como pretexto para quedar con ella.
