friendzone Nivel: Sexual

CAPÍTULO 10

"Aquellas" palabras de Jessica, retumbaron en mi mente toda esa noche y toda esa semana, no podía creer, que pudiera estar frente a la posibilidad de perder mi virginidad con una chica que me gustaba sentimentalmente.

La semana siguiente, llegué al barrio de Jessica, fui al supermercado a comprar Aguardiente, seguido de realizar mi primera compra de preservativos, fui lo más calmado y natural posible, compré un paquete por tres condones; por suerte se enfocaron más en preguntar por mi documento de identidad para el licor, que en los preservativos.

Entré a la casa de Jessica, usaba una camiseta gris junto con unos leggings negros, los cuales generalmente usaba bajo la falda corta de jean, pero no ésta vez; ella me preguntó por el Aguardiente, le pasé la bolsa donde estaba empacado, ella sacó la botella, y como no es nada boba, tomó los condones diciendo

-¿Y esto para quién es?

Yo la miré, sin decir nada, esperando que ella recordara "aquellas" palabras, con expresión en mi cara de "¿en serio?? ¿Cómo que para quién...??", pero me dijo

-Bueno Santi, me parece muy bien, que los tengas, llévalos siempre por si se te ofrece con alguna chica

Se me fueron los ánimos al oírla decir eso, me arrepentía de haberlos comprado, sentí que había perdido mi dinero, lo había podido aprovechar en otra cosa, pero bueno, ya ni modo.

Nos bebimos la botella de Aguardiente, vimos una película que yo había llevado en su portátil, se acabó, fui al baño, estaba aburrido en serio, pero Jessica se puso a indagar en mi memoria USB, buscando archivos ocultos, cuando volví al cuarto, me pregunta

-"Santiago Alfredo!" (Por alguna razón me decía así cuando quería llamarme la atención) ¿Qué es éste archivo oculto que tiene por nombre "hairy teen latina cowgirl orgasm"!!!!???

Realmente, quedé estupefacto, no sabía si decir algo o acercarme, y de nuevo preguntó ella

-¿Y bien Santiago, es lo que creo que es?

Sólo me senté al lado de ella, y asentí con la cabeza

-¿Puedo ver? (Ella usó un tono de voz completamente distinto, como interesada realmente en ver el vídeo)

-Sí crees ser capaz y no juzgarme, sí, abre el archivo

Jessica hizo silencio, nos recostamos a ver el video, sí como se imaginarán, efectivamente era un video porno, el video entró en acción a los treinta segundos, las escenas fueron subiendo de tono, empecé a acariciar la cola de Jessica, voluminosa, prominente, le di una nalgada, un apretón, pero ella no se pronunció, yo continué, pasé mi mano por su vientre, la bajé a su entrepierna, tocando su monte de venus por encima del legging, a lo que dijo ella

-¿Para dónde va esa mano, señor? (De manera pícara y seria al mismo tiempo)

Continué con mi trayecto, al primer toque, sentí que ya estaba caliente "ahí", le di un beso en el cuello, y fue como el boleto de acceso, porque luego de eso, pude meter mi mano bajo sus cacheteros sin ningún problema, rápidamente al masturbarla inicié jugando con su clítoris, se mojó, aprovechando que estaba reciente su jugo, chupé mis dedos con muchas ganas.

Tomé el legging y sus cacheteros negros para bajarlos; ella hizo ese arco tan sensual con su cintura, ese arco que daba permiso de continuar, quité su ropa de la parte inferior de su cuerpo, me incliné y empecé a saborear sus vellos, ingiriendo ese néctar especial, luego continué lamiendo sus labios menores, produciendo más de su "dulce miel", bebí un poco para luego empezar a meter mi lengua en su interior, la penetraba con ganas y tomaba su precioso líquido con mucha excitación, pasé mis manos hacia sus pechos, llevándolos bajo su brasier, ya tenía sus pezones como un par de gomitas, apreté sus senos, rápidamente empezó a gemir, a sacudir su cadera, pero de golpe me detuvo

-¡Quítate la ropa y busca el condón rápido!

Tal cual como lo haría el superhéroe Flash, salí disparado a buscar el empaque, quitarme la ropa, e ir con ella; como pude me puse el condón, aunque ella se supone que sabía, no supo cómo hacerlo y por intuición mía, yo pude hacerlo bien.

Me incliné sobre ella, Jessica tomó mi pene con su mano, lo dirigió a su vagina, a la vez que me traía de la cintura, fui entrando en ella, casi de inmediato llegué al cielo, aquella experiencia, no tenía comparación con nada que hubiera experimentado antes en mi vida, tuvimos relaciones en la pose del "misionero".

La penetré varias veces, aunque no las que hubiera deseado, ya que tanta dicha sólo duró cinco minutos, ella tuvo miedo por lo que era primerizo y por eso me detuvo; ella me quitó el condón, porque quiso ver como quedaba, observando lo mojado que estaba, de nuevo dijo unas conocidas palabras

-Estás todo mojadito (Sonriendo con picardía)

Nos vestimos de nuevo, ella se limpió en el baño mientras yo arreglaba un poco su cama, y su mamá llegó a la casa antes, justo cuando Jessica salía del baño, nos salvamos por un poco, pero fue un primer paso muy grande para mí, no pensé tener esa oportunidad, aunque sí hubiera querido que durara más tiempo.