03: Dejar ir.

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Todos lo esperaban, desde el primer día en que Beatrice quedó internada en el hospital lo esperaban, sabían lo que pasaría. Para mi era muy triste, el ambiente, las personas y la situación. Mucho más el ver lo rota que estaba mi madre, me dolía en el alma.

No me quedaba más que pensar que el ciclo de la vida de Bea estaba en su punto final, y realmente era devastador. Ver como la muerte y el cáncer se juntan para arrebatarle la vida a una persona tan joven y hermosa era realmente devastador, sólo quedaba una hora para que sucediera lo que nadie quería, pero debía ser, la desconectarían.

El doctor le estaba dando tiempo a los familiares para que pasaran a la habitación, y así darle el último adiós. Mi madre en ningún momento se armó de valor para hacerlo, decía que no quería despedirse de ella, no aun, ella sentía que era muy pronto y que pensaba que no la había disfrutado lo suficiente, que beatrice no lo había hecho. Y yo, no entre a darle el último adiós porque simplemente me daba mucho dolor hacerlo, pasaban un montón de fragmentos de todos los momentos que vivimos las tres juntas, ella, mi madre y yo y me hacía la cosa difícil. Quería mantener mi imagen de una Beatrice viva, y alegre, no quería llevarme siempre su retrato muerto lleno de melancolía y desesperanzas, porque sabía muy bien que así no era ella, y mucho menos querría que la recordaran de esa manera.

Y el verla me rompería, me rompería en frente de todos, cosa que no paso en dias anteriores. Quería resistir toda la tensión que sentía, pero me era imposible.-Ya vuelvo-avise a mi madre. Camine hacia el elevador, no puede contener más las lágrimas y comencé a llorar. ¿cómo es que alguien tan joven y lleno de vida puede llegar a sufrir tanto, y luego irse sin más? pensaba.

Al entrar al ascensor comienzo a llorar desenfrenadamente, tapo mi cara con mis manos en un intento de reprimir todo lo que sentía dentro, había sido muy fuerte estos últimos dias, había retenido mucho que sentía que en cualquier momento explotaría, y el que me desahogara de esta manera, era como liberará una gran tensión que se había acumulado en mi estos últimos dias.

-¿estas bien?-escuche decir.

Seque mis lagrimas y levante mi vista y me encontré con el moreno, estaba parado justo al lado de mi con su respectivo gorro y el ceño fruncido. Negué levemente mirando el suelo nuevamente-no, no lo estoy-dije en un tono inaudible.

-A ver-pronuncio haciendo que levantara la vista decidida a verlo-Estas en un medico, llorando-el miraba el techo del ascensor supongo que tratando de pensar. Fruncí el ceño confundida-podría decir con mucha certeza, que alguien murió o esta a punto de morir-soltó de repente.

El escuchar lo ultimo me entraron las ganas de llorar de nuevo.

-Esta apunto-susurre secando mis lagrimas. Estaba tratando la manera de no hacer ningún tipo de contacto visual con el, debido a mi estado.

Escuche como suspiro, y en un tono cansado me dijo-Dejar ir, aprende eso, o la vida te lo enseñara de la peor manera-sin mas, marco planta baja.





Timeless Souls. | Calum H.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora