La familia se encontraba decorando la habitación para una niña. Garret, un pequeño de siete años, le pedía a su padre, James, que lo alzara para que el pudiera pintar una de las paredes completamente, la madre del pequeño y mujer de James los observaba mientas acariciaba su hinchada panza. Con una enorme sonrisa en su cara, Serena se divertía viendo a sus dos hombres favoritos preparar la habitación de su hija. Tenia varios nombres en mente: Michelle, Jenny, Venecia, Cassia, Gwendolyn, Sophia. Todos y cada uno de ellos le resultaban fascinantes y hermosos, y podría elegir al que ella le gustase, ya que su amado esposo había elegido el de su niño.
El cuarto estaba quedando más que perfecto. Las paredes eran rosa claro, era más bien como un rosa pálido y a la vez calido. En su mente, tenia la imagen de una cuna blanca y con mantitas, un atrapa sueños colgando del techo, un caballo pequeño en donde su hija se podría subir colocado en una esquina, un enorme guardarropa que serviría completamente cuando su hija entrara en la adolescencia, una alfombra de mariposa colorida en el centro de la habitación.
Garret le pinto la cara a James, y ahora este contaba con el pómulo derecho de un color rosa. Jem río y alzo a su hijo por los aires. Miro a su mujer y sonrío.
-¿No quieres venir a pintar? Mira que tu hija se enfadara cuando sepa que has hecho de vaga y su padre y su hermano han pintado toda su habitación
-Que yo también estoy haciendo trabajo-replico Serena tranquila.
-¿Cuál mami?-pregunto Garret
-Pues, ¿no has visto mi panza? Es complicado cargar con ella dos veces-se la acaricio y continuo-Ahora, a trabajar.
Los hombres se miraron entre si, James con un brillo especial en sus ojos. Serena conocía esa mirada, era la idéntica a la primera vez que se habían conocido. Pensar en como habían empezado dibujo una sonrisa soñadora en rostro, si alguien en su adolescencia le habría dicho que iba a terminar así, casándose con Jem y teniendo dos hijos con el, se habría reído en su cara y habría escapado de allí. Pero ahí se encontraba, disfrutando de la vida con el, feliz y segura. La primera vez que lo vio... lo odio. De verdad ¿Quieren saber el por que? Bueno, solo hace falta ir años atrás, cuando James y Serena eran adolescentes y con toda la vida por delante...
ESTÁS LEYENDO
Nunca pensé que terminaría de esa manera.
RomanceEmpezamos por el final, ¿vale? Sabéis como termina la historia. Bien Puedes saber el principio de Serena. Puedes saber como se divirtió con sus mejores amigas, los malos tragos que tuvo que pasar, como conoció al amor de su vida, James, como tuvo qu...
