Capitulo 8: Siempre en mi mente

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DaeHyun se media una de las camisas que el staff le había proporcionado, debía probarse la ropa que complementaría su look de nuevo ido, en unos días tendría que tomarse las fotos que se usarían para los promocionales, daban los detalles finales a su estilo,  despeino su cabello que horas antes había sido decolorado se sentía extraño al reflejarse en ese espejo, la forma que se dibujaba era desconocida, pero de cierta manera le agradaba, de pronto la puerta del pequeño vestidor se abrió dio un pequeño salto pero una sonrisa se dibujo en sus labios al descubrir quien era el extraño en arribar, YoungJae se adentró con una enorme mueca de sorpresa.

—Wow me encanta como luce tu cabello.—Alabó sujetando varios mechones de esa melena ahora bicolor,  se coloco adelante para sacudir la camisa negra con estampado que usaba el cantante.—Luces increíble, eres tan guapo con el nuevo estilo.—Se acercó a su rostro pero descubrió una extraña mueca en aquellas masculinas facciones.— ¿Qué haces?.—El mayor lo sujeto por las muñecas para girarlo, ahora miraba su propio reflejo sobre la superficie del espejo con el mayor a sus espaldas.—¿Qué estas haciendo?

—Me alaba el chico que tiene el rostro más hermoso que nunca había visto, ni en una mujer.—Hablo sensualmente a su oído pegando su cuerpo a su espalda.—No entiendo porque no te animas a ser cantante tienes una hermosa voz.—Levanto sus manos para pegarlas sobre esa superficie lisa donde lo arrinconó.—Te llenas de halagos pero si tú eres un ángel.—Soltó una de las muñecas para llevar la mano derecha sobre el vientre del chico, la camisa que usaba se había levantado.— YoungJae ¿Olvidaste la pregunta que te hice en el pasado?.— Acercó sus labios al arco de ese cuello para besar uno de los lunares debajo de la nuca.—Ha pasado mucho tiempo y me he cansado de estar solo.

Un ligero gemido escapo de los suaves labios de YoungJae al percibir como esa mano acariciaba su abdomen, el aliento frío de su compañero erizaba cada centímetro de piel expuesta, él tenía razón nada les oponía iniciar una relación, aún cuando él fuera a debutar como artista la empresa sabría como ocultar tal romance, él y HimChan terminaron hace dos años, al igual DaeHyun perdió a su amada, era normal que dos almas que se atrajeran terminaran fusionándose, no podía negar su terrible atracción hacia el mayor, era todo lo que buscaba, las palabras se atascaron en su pecho al percibir esos dedos subir por su estómago,  el pecho golpear su espalda, aquella pelvis sobre su trasero, era tentadoramente maravilloso.

—¿No piensas contestar?.—Le volvió a cuestionar provocando un escalofrío en el contorno de la oreja del pelirrojo.—Eres alguien importante para mi.. YoungJae sabré cuidarte.— Libero la mano izquierda para sujetar la barbilla del menor, la acercó a sus labios.— ¿Qué contestas?—Un golpe en la puerta los asusto del otro lado la estilista le comentaba que se adelantaban al restaurant donde cenarían.—Ahorita los alcanzó.— Logró articular nerviosamente, la mujer asintió para salir de la habitación, YoungJae llevaba el dorso de la mano a sus labios para detener su risa.— ¿Vas a acompañarnos a cenar?

—Lo siento debo ir a un sitio.—Le contestó con una risa girándose para colgarse a su cuello.—Además no es bueno que me vean contigo, yo sé lo que te digo.—Acercó su rostro, sus narices rozaron peligrosamente.— Debes crear nuevos lazos, el staff que escogieron para el grupo es el mejor de la empresa, tienen experiencia, son amables, aprende a ganártelos y todo irá bien.—Sus alientos se entre mezclaron.— Debes hacer un gran trabajo haz que me sienta orgulloso de ti.— Su lengua recorrió la comisura de esos carnosos labios.—Si se vuelven en un monster rookie yo seré tu regalo.—Introdujo su lengua sensualmente en esa cavidad, un apasionado beso se desato.—Sé un buen chico DaeChan.

Le dijo entre suspiros se fusionaron en un demandante intercambio de saliva, continuaron devorándose por varios minutos, en ese instante la extraña personalidad del pelirrojo se transformo, olvido quien era, lo que se suponía debía hacer, su mente se formateo, la verdadera razón porque se volvió amigo de DaeHyun se desvaneció, se consumió en el fuego nacido entre esos dos cuerpos frotándose, se volvió humo, él también estaba cansado de estar solo, el recuerdo de HimChan se volvieran solo una experiencia del pasado, un fantasma al cual no le teme más, los minutos pasaron y la pareja tuvo que separarse nuevamente el artista fue solicitado por el staff, aunque aquella muestra de pasión fue honesta no lograron confirmación que nombre tenía su inusual amistad recién nacida, quizá ambos solo dejaban llevarse por el destino, que este les dibujara el camino correcto.

Me before youDonde viven las historias. Descúbrelo ahora