Capítulo V

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Law rápidamente entró en la habitación de Doflamingo, tomo asiento en su espacio designado y, con un pesado suspiro, acepto el sádico destino que llegaría en cuestión de minutos, segundos...

Y la puerta se abrió. Doflamingo había vuelto, pero algo en él lucía extraño.
En su mano derecha cargaba una botella de vidrio, alargada y de un color azul brillante, su contenido estaba a la mitad.
Doflamingo parecía ligeramente desorientado, sin embargo, para desgracia de Law, no lo suficiente como para hacerle frente y tratar de derribarlo.
Pronto el gran rubio comenzó a caminar por la habitación, dando vueltas, con un andar casi galante y tímido a la vez.
Inmediatamente después de notar aquello, Law solo llevo su mirada hacia la alfombra, solo esperando a que el horrible momento llegara.

-Yo... Quería... Quería llegar más temprano a casa-comenzó a balbucear Doflamingo mientras dejaba la botella azul sobre una mesita donde había reposaba un florero con unas largas flores de color rosa brillante-. Quería llegar más pronto... Lo siento mucho, en verdad.

Law seguía con la mirada fija en la alfombra, mentalmente, se preguntaba que rayos pretendía comunicar Doflamingo.

-Debiste sentirte muy solo... Sin mí, todo el día limpiando o solamente perdiendo el tiempo aquí encerrado, debe ser muy deprimente... Estaba pensando en... Sé que puede sonar algo atrevido pero... Quisiera darte tu propia habitación algún día de estos... Has sido un buen humano... Quiero decir, no has llorado ni gritado como suelen hacer casi todos...

Y Law se quedó totalmente impresionado; definitivamente Doflamingo estaba bajo los efectos del alcohol, su manera de hablar era tan "supuestamente" romántica, que se oía completamente ridículo al decir esa clase de cosas como si fueran palabras de amor.

-Sé que no debería decir esta clase de cosas...-se apresuró a decir con una risa que pretendía esconder un poco de ansiedad-. Pero... me pregunto cómo se sentiría... Estar con alguien como tú, quiero decir, sé que no eres alguien en el sentido estricto de la palabra... Las diferencias entre tú y yo... pero... Hace horas cuando salí, me di cuenta de algunas cosas...

Y Doflamingo se acercó a aquel florero donde posaban las flores rosas brillantes, tomo una y empezó a juguetear con ella.

-Cuando comparan a los humanos... Cuando comparamos a los humanos con insectos, ratas y basura...

Y Doflamingo llego frente a él, tomo su barbilla y la alzo para que el muchacho lo viera hacia arriba, directo a su cara. Luego comenzó a acariciar el rostro del muchacho con aquella flor rosa.
Law comenzó a sentir su cuerpo tenso, odiaba tener que verlo fijamente.

-Luego veo tu rostro y me pregunto... ¿Es esta la cara de la basura? ¿Son estos los ojos de una rata?-cuestiono Doflamingo con una suave voz.

Doflamingo lentamente comenzó a agacharse un poco para acercar su cara al rostro de Law, hasta que finalmente su nariz rozó con la del muchacho.
A esa corta distancia, Law pudo percibir el aliento alcohólico que emanaba de Doflamingo.

-Yo quisiera poder decirles a todos... Yo quisiera poder mostrarles...-y Doflamingo se dispuso a acercar lentamente sus labios a los de Law, estaba dispuesto a besarlo mientras que con una mano acariciaba el pecho del joven.

Law comenzó a temblar. Y de pronto Doflamingo se detuvo.

-No... Yo creo que no... Solamente eres un simple humano... Casi me convences...

Y una bofetada fue a dar contra el rostro de Law, arrojándolo hacia la alfombra. Doflamingo se abalanzo sobre este y siguió golpeándolo hasta que hizo sangrar el labio inferior del muchacho.
Law cerró fuertemente sus ojos, trataba de cubrir los golpes con sus brazos.
Pronto el rubio se despojó de su ropa y comenzó a arrancar la ropa del joven moreno.
Cuando finalmente ambos estaban desnudos, Doflamingo se tomó un minuto para contemplar el cuerpo de Law.

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