Trasfondo sublime.

Anécdota de un primer beso.

Eran las 5 pm de un simple día de semana, llevábamos más de una semana de novios y ni un puto beso, ¿Pueden imaginarlo?; ni un puto beso... ni una mano resbaladiza que se situara en sus nalgas, nada... aquel día fue tan increíble, estaba en ese momento en que uno se convierte en un ser de piernas temblorosas y nervios que inspiran taquicardia, me decidí a besarla una decisión nada fácil ya que siempre he sido un cobarde.

No fue algo tan fácil como decidir besarla y ya, fue mucho más complejo, mi cobardía me hizo girarle la cara y dejar que me besara el cachete y luego marcharme, gracias a dios o por desgracia me encontraba con unos amigos y nos marchamos, yo con mis amigos y ella con los suyos por su lado, durante parte del trayecto fui el motivo de burla del grupo, todos riendo de mi incapacidad para besarla, hasta que me harte aun la podía ver, era una recta infernal la calle y la podía ver a ella a unas 8 cuadras como un pequeño punto alejándose cada vez más.

No tarde nada en echarme a correr, corrí 8 cuadras y un poco más de una manera sobre humana sin detenerme, llegue sudado y con una falta de aire que se hacía notar, ella no comprendía nada y sus amigas me miraban como un loco, yo me sentía como tal, mis amigos venían corriendo 2 cuadras atrás y yo no tuve piedad con el tiempo, agarre sus hombros con mis manos la acerque y la bese, fue un choque abrupto con los complejos de un cobarde, ella me beso y correspondió el beso, así fue como nos besamos por primera vez.