Y creo que ese fue un fallo abismal, no sabia bailar, aún no lo sé, quizás si supiese seguir el ritmo entendería a las mujeres... ojalá fuese tan fácil como seguir el ritmo, hay que compaginarlo con movimiento, danzar, agregar unas vueltas, desengrasar esta oxidada cadera y lijar estas melladas manos destruidas por trabajo y ejercicio, darle sentido a las vibraciones y miradas que no se detienen en un punto fijo, que no se detienen en mi.
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Trasfondo sublime.
RandomLo que se calla y se traga siempre termina magullándonos el interior. Sobra decir algo sobre esto, el titulo habla por si solo. Quien aun no lo comprenda, necesita arriesgarse a leer.
