Viendo aquella vagina los días se me van de prisa, sus senos enormes, sus pezones tiesos presas del frió y la lujuria... Las cataratas de su humedad recorren sus muslos y bajan por su pierna, yo babeo, puedo sentir como pierdo el control... ¡ven demonios! pon tus nalgas en mi cara... déjame beber de tu vida, quiero conocer de primera mano lo que es salir de la muerte.
ESTÁS LEYENDO
Trasfondo sublime.
RandomLo que se calla y se traga siempre termina magullándonos el interior. Sobra decir algo sobre esto, el titulo habla por si solo. Quien aun no lo comprenda, necesita arriesgarse a leer.