¿Y el Bebé?

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Al Nacer Lucia, al casarme con mi padre, lógico que mi Gloria estaba molesta,  y yo estaba rabiosa por el hecho de que siempre jugara conmigo al hoy te amo, mañana te quiero, pasado mañana quien sabe, me dejaba claro que ella se moría por su amor humano. 

Muchos de los planes que tenia en la vida tenebrosa con ella se habían ido a la mierda,  se iba a casar conmigo y no lo hizo por que se enamoro de otra,  que solo jugaba con ella y la utilizaba para ser niñera de nuestros hijos.

-Bien eres libre de marcharte, pero te aclaro de una vez bonita, al irte pierdes a los niños y te recuerdo chula que si conviertes a tu amorcito en demonio estas perdida-

Ella sabia bien que la tenia atada con 18 razones,  después del nacimiento de Lucia habíamos planeado tener un serafín que se pareciera a ella, pero no, mis celos y su orgullo  hicieron que ese sueño se fueron al caño, mi vida era de nuevo rutina,  despertar, trabajar, entrenar, cenar con los niños, acostarlos a dormir, ir a la guardia y dormir poco,  estañaba el sexo.

-¡soy un demonio lujurioso y sin sexo muero de hambre!-

La forma de vengarse  fue esa,  solo era  niñera y madre de los niños,   y  yo el padre y que trabajaba como loco, sabia cuanto la amaba, cuanto me hacia llorar, aun lloraba en las piernas de mi rey, aun pedía que me diera la libertad de poder estar con ella.

-Se que la amas preciosa, pero eres mi esposa por el bien del reino,  ella lo sabe, ella sabe que nuestro matrimonio es una ilusión, pero esa ilusión debe estar por el bien del reino, te daré lo que me pidas menos el divorcio, en imposible hasta después de 100 años -

Yo lo mire,  y lo pensé y lo pensé, -gracias a dios mi acta de matrimonio no fue a dar a las puertas del infierno, si eso pasa no se disuelve nunca-- tocándome el vientre, aun hincada a sus pies de mi padre, sabiendo que ella escuchaba detrás de la puerta grite.

-¡Quiero un bebé, ella no me lo quiere dar, no me quiere dejar embarazada de nuevo, desde Lucia quiero otro, dámelo  tu,  lo exige tu reina!-

Cuando la corona me pesa, me vuelve loca y necia, y así fue el me daría un bebé, pero debía de encontrar la forma de hacerlo sin usar el cuerpo de Lestat, eso lo complicaba mucho, pasaron dos días y después de experimentación, magia y rito mi rey pudo tener un cuerpo físico,  lo vi sonreír, lo vi respirar aire de nuevo, de nuevo era el ancestral rey de dragones, al verme en bata blanca de laboratorio,  el me tomo por la cintura,  tenia el cuerpo de un demonio varón lujurioso,  lo note entre sus pierna, se recostó en la cama del consultorio, sin amor, sin besos, solo con palabras bonitas

-Déjate llevar, cierra los ojos y piensa que es Lestat- 

Asi lo hice, cerré los ojos y  me deje mover de arriba a bajo, empalada por un miembro entre mis piernas,  no era lo más romántico de la vida, pero así quede en cinta de nuevo, por deseo y capricho, por desamor y por una ilusión 





Lluvia PaganaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora