La hermana de Pedro - Matteo y tu

Capítulo 2: "¿Chica Talentosa? Esa soy yo"

Yo queriendo probar mis patines fui a ponerme mis patines para patinar un poco.

Fui directo a la pista de patinaje pero choque con alguien...

— Lo siento, no te vi– dijeron y lo mire. Ese chico se me hacia bastante familiar, el frunció el ceño y me vio de mas fijamente —¿____? ¿Eres tu?– dijeron y lo observe mas concentrada.

— ¿¡Nico!?– dije sorprendida y el sonrió alegre y me lance a abrazarlo ¡Estaba tan diferente pero a la vez tan parecido!

— ¿Que haces acá? Pedro no me dijo que venias– dijo y asentí.

— Es que era una sorpresa.... ¡Sorpresa!– dije y el rió — Oh dios... hace años que no te veía– dije y lo abrace nuevamente.

— ¡Estas tan diferente!– rió — Bueno, tengo que seguir trabajando, nos vemos– dijo para finalmente irse.

Al parecer Nico también trabaja aqui.

Me adentre a la pista y vi todo al rededor y como la gente patinaba, sonreí y empece a patinar. Hice unos cuantos trucos... pero eran básicos, nada que alguien no pueda hacer.

De repente, choque con una chica. Era la misma que vi antes que estaba ayudando a los demás.

— Perdon– dijo la chica — ¿Estas bien?– pregunto y reí.

— Solo chocamos un poco, no me fracture ni nada– dije y reímos.

— Oye... ¿Te me haces familiar, eh? ¿Te conozco?– pregunto y negué.

— Debe ser porque mi hermano trabaja aqui, siempre dicen que nos parecemos... soy la hermana de Pedrito– dije y sonrió riendo un poco — Soy ____ ¿Y tu?– pregunte.

— Soy Luna– dijo y nos extendimos las manos —Y... ¿Vas a la escuela?– pregunto.

— Bueno, tengo 16 años y recién me mudo... pero creo que mi mama me va a inscribir en una, anoche me hablo de una que se llamaba.... ¿Como era?– pensé un poco tratando de acordarme — Bueno, ahora no me acuerdo... pero me dijo que era una de las escuelas mas prestigiosas de Argentina– dije haciendo énfasis y ella rió.

— No sera el ¿Blake South College?– pregunto y de inmediato recordé el nombre.

— ¡Ese mismo!– dije y ella sonrió alegre.

— ¡Es donde voy yo!– dijo y sonreímos alegres — Bueno, debo seguir ayudando a los demás, nos vemos mañana en la escuela ¡Bye!– dijo y se fue mientras me despedía con la mano.

Me dio un poco de sed, así que fui a la cafetería por un refresco. Mi hermano, como me quiere tanto me atendió y pedí un jugo de naranja.

Fui a buscar donde sentarme pero choque de nuevo con alguien ¿¡Porque rayos hoy estoy chocando tanto!? debe ser por lo distraída que soy... nunca había chocado con tanta gente el mismo día.

Sujete fuertemente el jugo de naranja y por suerte no se cayo nada al suelo ni a la persona con la choque. Mire hacia arriba para ver quien era.

— ¡Tu eres el chico que patino como un dios!– dije sin vergüenza y el rió, me sonroje por lo que dije — Lo siento, es que te vi patinar y me sorprendí... pero claro, eh visto mejores. Como yo– dije arrogantemente. Mi otra yo salio a la luz.

— Vaya, aqui tenemos a una chica talentosa– dijo en un tono italiano riendo — Dudo que seas mejor que yo, soy el rey de la pista– dijo con aire de superioridad y reí.

— Si claro, aunque practiques todo lo que puedas jamas me vas a superar– conteste. Algo común en mi, es que cuando quiero ser la mejor, trato de serlo y casi siempre lo consigo. Mi lado presumido siempre sale a la luz cuando se trata de patinaje.