wishes [cancelada]

d o c e: la organización y la canción

Louis se despertó al día siguiente por los cantos de cierta persona rizada e insoportable en su oído.

—¡Feliz navidad a todos, feliz navidad a todos, feliz navidad a todos, y año nuevo también! —sintió la presencia de Harry moverse al otro lado y la claridad a través de sus párpados le indicó que la jodida jirafa había abierto sus cortinas—. ¡Arriba, Lou! ¡Es mediodía y es navidad!

—Harry, voy a partirte tu regalo por la cabeza si no sales de aquí en este jodido momento.

El rizado ni se inmutó, caminando para todos lados. Louis escuchó el ruido de papeles y bolsas y se obligó a abrir un ojo, viendo cómo Harry se agachaba entre las bolsas llenas de regalos que habían traído el día anterior de la cabaña que sus mejores amigos habían alquilado para celebrar su cumpleaños.

El mayor sonrió, recordando todo lo ocurrido la noche anterior. Cómo había coqueteado descaradamente con algunos chicos que apenas podía recordar que conocía.

—Mhm —Harry murmuró, apenas prestando atención a sus amenazas y seguía buscando en aquél lío de envoltorios coloridos y bolsas con diseños.

También recordó sus deseos a la hora de soplar las velas. Sabía que era una estupidez, eso de pedir los tres deseos, y aún así, lo primero que pidió fue que Harry jamás se apartase de su vida.

Nunca se lo admitirá en voz alta.

Cuando pareció encontrar lo que buscaba, se levantó de un salto, y Louis temió.

En las manos de Harry se alzaban dos suéteres de navidad. Dos jodidos suéteres enormes, de lana y con horribles diseños navideños.

—Dime que son regalos para los chicos.

Harry sonríe. Louis ya se está negando a utilizar un suéter con renos besándose.

—Para nosotros, Lou.

Louis se negó completamente. Estuvo a punto de lanzar el suéter por la ventana hasta que Harry comenzó a hacer pucheros como un niño pequeño. Y luego...

—¡Bien, bien! Si no lo quieres me lo das —su actitud cambia completamente, luciendo casi enojado. Se acerca al castaño arrebatando el suéter de sus manos y se voltea—. Yo tengo amigos que pueden utilizarlo. Nos tomaremos muchas fotos. ¡Llamaré a Nick!

Louis se niega completamente a que Harry vaya a pasar navidad con aquél tipo. Corre hacia el más alto y se cuelga de su espalda.

—¡Tú no vas a llamar a nadie y no te tomarás selfies con nadie más que conmigo!

* * *

El resto del día es un borrón de rojo, dorado y verde mezclado con canciones navideñas y galletas de jengibre por todos lados. La madre de Harry aparece con Gemma y la madre de Louis y sus hermanas están encantadas con el pastel que ha preparado. Siempre han pasado las festividades ambas familias juntas y éste año no sería la excepción.

Harry ha repartido muérdago por todos lados y cuando Niall llega junto con los chicos y se para bajo el marco de una puerta junto a Fizzy, Louis estuvo a punto de sacarle los ojos. Ambos compartieron un pequeño pico y todos acabaron riendo. Excepto Louis a quien no le hacía mucha gracia que su amigo ande besando a su hermanita menor.
Sí, podrá tener dieciséis, pero sigue siendo la pequeña bebé de Louis.

Todos intercambiaron regalos. Cuando les toca a Louis y Harry darse los suyos Harry ríe, alegando muy emocionado.

—¡Lo envolví yo mismo! —chilla, sacando el regalo envuelto perfectamente en papel dorado y con un moño verde decorándolo, de detrás de su espalda. Louis sonríe, mostrándole también el suyo que es un desastre de papel rojo, cinta y quizás hay un moño escondido en todo el revoltijo.