Club de asesinos

04. Sé lo que hicieron el verano pasado

Habían pasado dos días desde que había sucedido el acto del coche de Julie, con lo cual una investigación se había realizado y los jóvenes debían ponerse con mayor cuidado ante los hechos para no lucir cómo sospechosos.

Billy estaba en casa disfrutando de su entorno, cómo había sido durante los últimos días, razón por la cual había comenzado a hacer un par de limpieza de objetos en su habitación y alrededor de su propio hogar, puesto que se encontraban en periodos vacacionales de la universidad. Estuvo por un instante distrayéndose con viejos cassettes que estaban en una caja tratando de analizarlos, mientras que por otra parte estaba el sonar de "Pretty Fly" del grupo Offspring, cómo fuente de inspiración y parte de su nuevo sencillo.

Estuvo atento tratando de hacer el mejor de los trabajos, pero su estancia se vio interrumpida cuando un mensaje llegó a su teléfono, provenía de Michael avisándole del homenaje que harían a Katrina, la difunta encontrada en el coche de Julie, pero al no tener los rastros completos no podría existir un funeral completamente entero para la familia y además de eso, no querían exponer a la hija de los Cox ante todos, puesto que la gente hablaba como si hubieran visto a los jóvenes asesinar a la chica y los tachaban de ser responsables de dicho acto.

Al final decidió que asistiría, pero tan pronto había enviado el mensaje respondiendo que estaría presente, uno nuevo entró, por lo que decidió abrirlo, pero éste parecía no provenir de un remitente conocido puesto que el número lucía desconocido y el contenido no era de alguien familiar ya que lucía cómo si le estuvieran viendo en ese momento.

"Si yo fuera tú revisaría mejor mis cosas, porque te he dejado un recuerdo en tu armario pero asegúrate de verlo a solas"

Aquello estremeció un poco al joven puesto que lucía algo demasiado extraño y al principio pensó que se trataba de una broma de alguno de sus amigos porque su armario era lo último que había dejado, aunque no por eso dejaba de ser extraño. Se acercó a paso normal al armario y abrió las puertas de par en par puesto que no sentía ningún miedo alguno, por lo que comenzó a buscar entre sus ropas pero no encontraba nada extraño, hasta que de pronto pudo sentir cómo algo caía al suelo, viendo que se trataba de un VHS con una nota que decía "Ver bajo precaución", lo cual lo orilló a pintarse una sonrisa porque no sabia de que se trataba, así que se dispuso a ir al reproductor que estaba en su sala para no quedarse con la duda el resto del día.

Estando ahí, encendió el televisor y puso de manera inmediata aquella cinta para ver de que se trataba, pero lo que su contenido tenía no era algo demasiado placentero. En cuanto puso los primeros minutos, no dudó en quedarse helado porque no se trataba de una historia de terror ni de un acontecimiento extraño, sino de un tipo de traición dentro de él. Era el video de Billy manteniendo relaciones con uno de sus profesores. 

Rápidamente quitó aquella reproducción quedándose frente al televisor por instantes con un rostro con miedo puesto que el había creído que esa aventura había quedado en el pasado, pero al parecer alguien creía querer demostrarle que nunca se podían olvidar las cosas. Aquél momento de miedo se interrumpió cuando alguien llamó a la puerta. Era difícil no imaginarse que podía tratarse de un peligro, por lo que caminó a la cocina en busca de un artefacto que sirviera como arma puesto que escuchaba la puerta demasiado fuerte y con desesperación. No dudó en avanzar con sigilo y tan pronto llegó cerca del territorio comenzó a hablar y susurrar cosas.

— ¿Quién está ahí? — Preguntó como si se tratara de algún asesino en cautela.

— Soy Randy, necesito que me abras ahora — Pronunció el chico por fuera de aquella casa.

— Vaya... — Respiró Billy profundamente puesto que se trataba de su amigo y ya no tenía que preocuparse por ser asesinado, que era lo que él pensaba. Abrió la puerta dejando paso a aquél hombre que estaba dispuesto a hablar con él.