One Treasure 《YoonMin》

O6; Sirenas

Me desperté sobresaltado con aquella pesadilla. Desde que le quité la vida a Charles Smith, no podía soñar con otra cosa que no fuera su cráneo siendo perforado por mi bala.
Me froté el rostro con insistencia, como tratando de alejar esos pensamientos. ¿Aún olía a pólvora? Imposible, Jimin. Habían pasado cuatro días desde que te volviste un saco de pulgas sin sentimientos como el resto de esclavos con aires de grandeza que ocupaban ese estúpido navío.

Salí a refrescarme con la brisa, y vi una figura a lo lejos apoyada en la madera vieja y desgastada del barco. Me acerqué con cuidado, y aunque la madera crujía bajo mis pasos, el sonido de las olas rompiendo contra el barco lo tapaban bien.

El capitán.

Mi cuerpo entero se estremeció y di media vuelta para regresar, pero su voz seca y tan fría como siempre me detuvo antes del primer paso.

—Park —Me volví a girar hacia él, temeroso. Pero aún continuaba oteando el horizonte... parecía muy relajado—. Acércate.

Obedecí y apoyé mis codos en la gruesa y sólida madera, mirándole de reojo un poco cohibido.

Ambos guardamos silencio, ninguno lo rompía; yo por temor a desobedecer, y él... simplemente parecía haber olvidado mi presencia.

Miré al frente, cerrando los ojos por la brisa tan agradable -aunque ciertamente helada-.

—Esto es lo que merecemos —Abrí mis ojos y le miré. No me volvió la mirada—. Somos seres humanos. Merecemos la libertad.

Yo tragué saliva y me atreví a responder, desviando la mirada hacia el agua que bailaba como si quisiera subir a bordo en cada choque.

—¿Y por qué me retiene?

Él hizo un sonido molesto.

—Te doy una vida mejor de la que te espera en tierra si llegases —Solté una carcajada sarcástica—. Ya eres de los nuestros. Has robado, has...

—Matado —. Le interrumpí. El asintió.

—Has matado también —Cambió la postura y me miró por primera vez. Sentí que me estremecía—. Te enseñaré a luchar, Park. Si algún día quieres ser libre de mí, podrás matarme.

Su tono era más serio de lo normal, y yo también me giré para observarle: la luz de la luna palidecía más aún su piel de mármol y la brisa despeinaba su cabello descubierto. Nunca le había visto sin el sombrero. Sus rasgos felinos eran sumamente atrayentes con esa luz, y recordé las leyendas de los camaradas de los barcos ingleses; hablaban de sirenas.
Unos seres monstruosamente bellos, con apariencia inofensiva y grácil, capaz de seducir al marinero más puro e incorruptible. Unos seres que tras seducirte te sumergían en las profundidades y te devoraban hasta que fueras reducido a nada.

Min Yoongi tenía un poco de eso.

—Déjame mostrarte de lo que eres capaz... —Parpadeé varias veces, ¿cuándo se había acercado tanto? Me estaba acorralando contra donde estaba apoyado—. Podrías ser brillante.

Sentí una brisa gélida recorrer mi nuca, ¿por qué continuaba acercándose? Muy lentamente, comenzaba a sentir su respiración en mis labios.

—¿Por qué... yo? —Interrumpí su avance, mirándole a sus ojos rasgados.

A veces sentía que podía mirar mi alma.

—Park, no me detengas cuando intente besarte, ¿de acuerdo? Es una orden.

Asentí, pero.

Qué.

¡¿BESARME POR QUÉ?!

Sentí que mi cara entera ardía, ¡claro! Era evidente, ¡eres idiota, Park!

Él me continuó mirando y se separó tras unos segundos de incomodidad para mí. Sin decir nada, volvió a su camarote y me dejó ahí.

Deshaciéndome contra la madera.

Juro que algún día le mataré, capitán. Lo juro.

💀💀💀

N/A: A mis AMADÍSIMES lectores de Nice Chance, sigo trabajando en el pto epílogo, pero quiero que quede bien y me presiono demasiado, perdón por tardar tanto. ;; ESTO ES MUCHO MÁS RÁPIDO Y SENCILLO DE ACTUALIZAR.

Muchas gracias por leer y a los poquitos que comentan en esta historia ~ uvu