...Te Amo, Te Deseo...

capitulo 35

Para lograr saber si esa persona tenía a León Silvia decidió ir sola y salió de la casa con la excusa de que necesitaba estar sola, Jorge se ofreció a acompañarla pero ella obviamente no aceptó y le pidió que se encargara de los medios de comunicación que ya estaban afuera de su casa listos para preguntar cosas sobre él secuestro de León....
Una hora más tarde ya Silvia se encontraba fuera de la casa de la persona de la que sospechaba, decidió asomarse por una de las ventanas y si tenía razón allí estaba Elizabeth jugando con sus mellizos y del otro lado del lugar se encontraba en pequeño León llorando...
Al principio Silvia quería entrar y golpear a Elizabeth, pero se detuvo un momento a pensar las cosas y decidió grabar y llamar a la policía pues así tal vez Jorge podría pedir la custodia de los mellizos y no tendrían porque volver a ver a Elizabeth, cuando ya la policía había llegado y se encontraban poniéndole esposas Silvia decidió llamar a Jorge para que le informara a los demás.. Pocos minutos después ya Silvia estaba con León en sus brazos le pidió a los policías que fueran discretos y que esperaran a que llegara Jorge para ver que decidía con respecto a Elizabeth pues a pesar de todo era la mamá de sus hijos... Media hora mas tarde Jorge, los amigos de Silvia y su mamá ya estaban en la casa de Elizabeth, doña Silvia cargaba a León, Grettel a Gloria y Florencia a Manuel, mientras que Silvia hablaba con Jorge sobre lo que pensó de pedir la custodia de los mellizos poniendo como mayor pretexto que Elizabeth no estaba en condiciones de cuidar a dos bebes y dando como muestra lo que acababa de hacer y para que todo fuera mas fácil la amenazarían diciéndole que si no les daba la custodia de los mellizos la meterían a la carsel por el secuestro de León.... Le pidieron a los policías que se retiraran y hablaron con Elizabeth sobre los mellizos y la custodia, Elizabeth acepto sin problemas pues prefería mil beses tener buena reputación a tener a sus hijos que para lo único que los quería era para retener a Jorge pero como no le funcionaron que más daba.... Después de que Jorge le llamara a su abogado y le explicara, todos se retiraron a sus casas....
Al llegar a casa de Silvia:
- oye Silv y como encontraste a León?
- pues es que no se creo que fue mi instinto y pues por eso decidí sanie de la casa
- pudo haber sido peligroso
- si lo se guapo, pero tena que hacerlo
- me hubieras pedido que te acompañara o mínimo avisarme *dijo Jorge con voz de enojado*
- ya amor ¿me perdonas? Andale guapo perdoname *respondió Silvia al tiempo que lo llenaba de besos por toda la cara*
- bueno así si te perdonó mi guapa, lo bueno es que ya todo paso
- si mi príncipe y mira ahora tendremos casa llena todos los días jaja *dijo mientras miraban a los tres bebes gateando*
- si, oye sobre eso tenemos que comprar una casa que sea de los dos y un poco mas grande porque ni tu departamento ni el mio son adecuados para nuestros hijos
- si verdad, bueno por ahora quedense aquí en mi departamento esta mas adecuado para los niños y mañana buscamos casa ¿si?
-eres demasiado inteligente guapa te amo
- y yo a ti más, oye guapo si te trajiste las cunas y cositas de los mellizos?
- si guapa están en el jardín enseguida lo subo al cuarto de León
- si amor, anda ve que yo voy acomodando su ropita.

Un par de horas más tarde ya Silvia y Jorge se encontraban tratando de dormir a los mellizos, pues estaban un poco chillones, ya león se encontraba dormidito, Silvia logro dormir a Manuel lo acostó en su cuna y le quito a Gloria de los brazos de Jorge la cual a los pocos minutos se durmió y Silvia acomodo en su cuna.

- Silvia, gracias se que esto es difícil para ti y ademas cuidar a tres no será nada fácil
-no me agradezcas yo a esos bebes los amo y me encantará ser su mamá ademas solo son tres esperate al otro y solo es en lo que nos acostumbramos

jorge se saco de onda con el comentario de Silvia "esperaté al otro" aunque no le tomo mucha importancia
-te amo mi bonita, ven vamos a descansar

Silvia y Jorge se fueron a la recamara y enseguida se quedaron dormidos pues había sido un día muy difícil.