Prisionera

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Lapis se quedo dura ante la terrible escena que desataba ante sus ojos. Jasper huso el desestabilizador de gemas con aquella fusión, luego golpeo a Steven y lo dejo ahí tirado sin moverse. El corazón de Lapis se encogió, estaba realmente aterrada eh inmóvil. A la fusión le siguieron esa pequeña amathysta y la perla.
Jasper recogió las gemas y se las lanzo a Peridot, la cual hizo malabares tratando de sujetar a las cuatro gemas.
—Ah...ay...oye no me las lances sin avisar ¿que se supone que debo hacer con ellas?—Peridot no entendía muy bien la actitud de Jasper, ni lo que eso significaba para su misión. Una misión que Jasper ignoraba.
Peridot había recibido órdenes especificas de no revelar la totalidad de la misión ni a Jasper, ni a Lapis.

—Quiero que bailes con ellas. —se burlo— ¡¿Que mierda crees que quiero que hagas con ellas?!—Enciérralas antes de que regresen a su forma!.—ordeno Jasper encaminándose donde se encontraba el niño, lo levanto de la remera cuando sintió algo abalanzase sobre ella. Era Lapis tratando de hacer que lo soltara.
— ¡Sabia que eras una traidora!—grito Jasper sacándose a la molesta gema de encima y lanzando contra la playa, esto dejo algo aturdida a Lapis.

—¡¡Es solo un humano!! ¡Lo juro!—grito Lapis. Podría haber usado su poder, pero en ese instante no podía pensar con claridad, si eso era realmente lo correcto. Salva a Steven y convertirse en una rebelde e ir contra Jasper,o simplemente obedecer. Sintió la inmensa mano de Jasper cazarla por el cabello y arrastrarla por la playa hasta la nave con el niño desmayado bajo el otro brazo. Peridot hace tiempo que ya se encontraba dentro cumpliendo las ordenes.

—¡¡Por favor, te lo ruego!!Jasper deja al niño—grito Lapis sintiendo el frió metal por el que era arrastrada, pensó que tal vez Jasper se conmovería y dejaría a Steven, pero eso solo era un pensamiento.
Jasper sostenía a la débil eh inútil nueva imagen de rose en el brazo izquierdo y tenia sujeta a Lapis en el derecho. Prefería hacer oídos sordos ante las súplicas de Lapis, pero estas la ponían más furiosa y al mismo tiempo le causaban otra sensación, una de querer tomarla , besarla, secar todas sus lagrimas y consolarla de esa manera que tanto le gustaba. Por otra parte tenia deseos de que se callara, esa forma de defender a rose, esa forma de rogar por la burla que era rose ahora, ella sabía que rose había tomado esa forma para burlarse de ella, y de todas las gemas de la tierra, para decirles que algo tan débil como un humano podía romper a su diamante.

Echo al niño a una celda, soltando a Lapis para poder colocar su mano en el panel de control. Lapis corrió a la celda, tratando de tomar al niño entre sus brazos, pero una pared amarilla traslucida la detuvo, apareció ante sus ojos y al chocar con esta sintió como si un rayo le traspasara el cuerpo y la obligara a retroceder; por un momento llego a pensar que su cuerpo físico desaparecería. Jasper la tomo de la cintura, la levanto llevándosela con ella mientras Lapis se resistía pataleando y gritando.

—¡¡Noo!!Steven—gritaba Lapis.
—¡Cállate!—gruño Jasper mientras la llevaba a la celda más alejada.

Jasper finalmente la soltó en una celda lo bastante alejada, Lapis cayó de bruces al suelo y rápidamente se levanto decidida a pasar las líneas enemigas pero era en vano.
Jasper la sujeto del rostro y la obligo a mirarla—No quería creer que le servías a rose, pero al parecer mis sospechas eran ciertas. Trabajas para la gema que destruyo a mi diamante—lapis sintió la tristeza y dureza con la que estaban cargadas esas palabras.
—Eso no es cierto. Steven es mi amigo, él me libero del espejo. No tiene nada que ver con esta guerra, con todo este odio, él es inocente—las palabras de Lapis se oían como suplicas. Jasper vio su odio opacado por la tristeza con la que le hablaba su sufrida amante.
—Escucha—dijo Jasper presionando su agarre sobre la mandíbula de Lapis—Tu me gustas Lapis— sonó casi como un susurro. Lapis que hasta el momento había estado luchando, se quedo petrificada—Si te comportas y haces lo que digo, cuando lleguemos al planeta madre podre alegar por ti — aflojo la presión con la que tomaba a la otra gema y se le acerco peligrosamente a la boca. La beso.

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