Kilómetros

Capítulo II

Durante toda la celebración sentía su mirada, pero no me atrevía a voltear pues no quería mostrar algún tipo de interés, ya había tenido suficiente con la historia pasada, hacía ya casi un año de todo aquel sufrimiento llamado "Alberto" y ya estaba logrando dejarlo atrás, así que para que buscarle...

Después de las fotos, nos dirigimos al salón dónde sería la fiesta, moría de hambre ya que mi última comida había sido a las 8 de la mañana, pues decidí no comer nada por ir a peinarme, y ya eran casi las 9 de la noche.

Cuando estaba esperando a que entrara la festejada, entro él con su hermosa sonrisa y esos ojos; leía historias en las que decía que te podías perder en la mirada de una persona y el tiempo no transcurría, yo pensaba que eran eso, sólo historias. Hasta que llegó él y desde ese momento no pude apartar mi vista y él fingía no notarlo pero era evidente

-¿Qué tanto miras?- Me decía mi mamá que estaba sentada a mi lado

-Nada, sólo espero a que sirvan la cena, tengo mucha hambre –Mentí yo

Me preguntaba quién era él, hace ya 8 años que conozco a esa familia y nunca lo había visto en fiestas pasadas (¿Cómo iba a olvidarlo?). Su mesa estaba tan sólo una después de la mía. ¿Dónde está Samy ahora que la necesito? Samy es mi mejor amiga, también estaba invitada pero por problemas familiares no pudo llegar.

Volteaba disimuladamente y lo veía, intentaba no hacerlo me decía que no podía, pero ya era tarde. Su sonrisa ya me había atrapado y de ese chico, ni su nombre sabía.

La hora del baile, en un fiesta después de la cena la hora de bailar es mi parte favorita, cuando voy en familia siempre bailo con mi hermano, pero este día él no estaba dispuesto a bailar y yo me conformé con ver bailar a los demás. De pronto una mano tocó mi hombro y me dijo si quería bailar, estaba indecisa si aceptar o negarme a su petición, pero era él, era EL CHICO y además si quería bailar, así que acepté y nos abrimos paso entre las personas. Bailamos un par de canciones y luego me invitó a sentarme en su mesa, ahí me contó que estudiaba veterinaria, que era primo de Fany pero vivía en Cardel, que hace un tiempo que no tenían comunicación pero que la estaban recuperando y por eso estaba en la fiesta, debido al ruido de la música decidimos salir del salón para poder platicar mejor, ya pasaban de las 12 de la noche y era obvio que ya hacía frío y por salir corriendo olvidé llevar algo con que taparme, él notó que tenía frío y sí, me dio su saco.