El Invierno Tiene Nombre

Epílogo

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Nº de palabras: 1484

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Steve observa a T'Challa pasar a Bucky en su camino hacia la salida, notando la forma en que los dos asintieron en señal de respeto al otro. Steve está feliz de ser al fin libre. Es consciente de que lo de hoy no habría podido pasar sin Bucky y los Vengadores.

―Hey, ¿qué es lo que tenía que decirte T'Challa?

―Me dijo que esperaba que yo encontrara la paz en esta vida. Creo que lo he hecho y la estoy mirando en este mismo momento.

Bucky se encontraba anonadado por las palabras de Steve. Ama a este hombre más que a nada en el mundo y habría luchado hasta morir para protegerlo.

―Oh, Steve, te quiero tanto. Tú también eres mi paz, mamón. No necesito nada más en la vida excepto a ti. ¿Listo para salir de aquí?

―Listo. 

El equipo está de vuelta en la torre, celebrando la reafirmada libertad de Steve.

―Steve-o, ¿qué vas a hacer ahora que eres un hombre libre? ¿Correr en pelotas por Central Park? ¿Escalar la montaña más alta? ¿Unirte a los Vengadores?

―Nada de correr desnudo para mí, gracias. No sé del todo lo que haré, pero sea lo que sea, lo haré con Bucky.

Tanto él como Bucky ponen los ojos en blanco al oír el «Aww» colectivo.

―De hecho, Steve y yo tenemos algo que contaros. ―Le echa un vistazo a Steve, apretándole la mano en busca de apoyo, para luego volver a mirar a sus amigos―. Steve y yo hemos estado pensando en nuestro futuro y en lo que queremos para nuestra vida. Después de todo lo que él y yo hemos pasado, como que queremos tomarnos un descanso.

La habitación se queda en silencio cuando sus amigos los miran impresionados. Natasha es la primera en hablar.

―¿Vas a dejar de ser un Vengador?

―No. Os quiero a todos vosotros y nunca os dejaría o abandonará. Stevie y yo queremos desconectar por un tiempo. Vivir la vida sin tener los ojos ajenos puestos sobre nosotros o sentirnos como si fuéramos constantemente observado. Nos he comprado una casa en Oregón. Está en medio del bosque y no hay nadie en kilómetros a la redonda. Además, está justo al lado de un lago precioso. Es perfecto para nosotros.

―¿Y si te necesitamos?

―Vendré. No estoy abandonando nada. Si se necesita a los Vengadores, entonces vendré.

―Lo mismo digo. Si se requiere la ayuda de los Vengadores, Bucky y yo vendremos.

Las noticias no sorprenden al equipo tanto como había esperado. Por una parte, ellos entenderían que no quisiera volver a luchar contra un ser vivo nunca más. Pero por otro lado, él es Steve Rogers, un chaval de Brooklyn demasiado cabezota para evitar una pelea.

―Os visitaremos. Y vosotros podéis visitarnos también. La casa es lo suficientemente grande para todos, hasta para Thor.

―Me alegro por vosotros, chicos. Los dos os merecéis algo de paz y tranquilidad.