Speechless »ChanSoo«

Capítulo II.

Do Kyungsoo iba en segundo de preparatoria, y odiaba con toda su alma asistir a clases. Pero no podía decir nada, porque sus padres se esforzaron mucho para que entrara al mejor instituto de Seúl, porque sus notas eran las mejores del curso, porque pronto estaría becado en una de las universidades más prestigiosas con oportunidad de estudiar en el extranjero un par de semestres. Porque tenía la vida arreglada. Sin embargo, Kyungsoo, no podía estar seguro de que duraría hasta la universidad. No teniendo a Im, Kim y Lee en su clase.

Todo había comenzado tan lento, tan, tan lento que se arrepentía de no haberlo detenido en su momento. Pero a quién podría engañar, ni siquiera en su casa era capaz de hablar sin ser un completo torpe. Por eso no hablaba, se limitaba a dar respuestas cortas y con el tono más amable que pudiese para que no lo malinterpretaran, era lo menos que podía hacer para intentar ir con la corriente, pero al parecer eso no le bastaba a sus compañeros. A mitad de primero, Im le tiró el almuerzo al piso por accidente, como se disculpó de inmediato, Kyungsoo asintió y recogió los alimentos antes de algún despistado los pisara y quedara peor. Im no lo ayudó, y Kim le dijo a modo de broma.

—¿Te ibas a comer todo eso solo, Do? ¡Daebak!—Kyungsoo frunció sus labios y no elevó siquiera la mirada, iba a decir que su madre solía darle demasiado y que nunca terminaba de comerlo todo a menos que tuviese mucha hambre, pero no lo hizo. Contagiado por la estúpida risa de Kim, Im y Lee también soltaron unas carcajadas. Im quiso ir al baño y su amigo lo acompañó, excepto Lee, quien lo ayudó a limpiar el piso a pesar de que seguía con una sonrisa en los labios. Kyungsoo le sonrió para agradecerle, y Lee le correspondió.

Semanas después, Kim Yonho le tiró el almuerzo de nuevo. Aunque quiso hacerlo ver como un accidente, Kyungsoo se dio cuenta de que no lo fue, pero nuevamente se sentó a limpiar el desastre. La clase se rio por la torpeza del amigo de Im, excepto Do, porque Lee se había ausentado ese día y nadie le ayudó a limpiar; tampoco le causó gracia porque en esta ocasión no alcanzó a probar bocado.

Ahora que Kyungsoo iba en segundo, se podía hasta dar el lujo de enumerarlos: Im Dongsi era el peor, era un cabrón cruel y decía groserías a menudo, incluso en un par de ocasiones golpeó a Kyungsoo mientras nadie miraba para comprobar si al menos se quejaba; luego venía Kim Yonho, él también se reía horriblemente y tiraba todas las cosas de Kyungsoo al suelo, pero lo que más hacía era molestarlo por ser mudo, a veces pisaba las cosas que tiraba al suelo; luego estaba Lee Eunseok, él era como una marioneta, nunca le hacía daño a Kyungsoo directamente, y al principio lo ayudaba, pero ya no era así. Lee no era malo, pero sí era muy estúpido y cobarde. Eunseok era el tipo de chico que solía arrepentirse de lo que hacía, y siempre se disculpaba con Kyungsoo a espaldas de sus amigos.

Si fuera solamente eso, quizás Kyungsoo podría tolerarlo, pero el tema de su almuerzo fue tan seguido desde la broma de Yonho que su cabeza tuvo más de un problema. En las vacaciones antes de iniciar el segundo año, sufrió un desmayo en su casa. Sus padres ya habían estado preocupados por el comportamiento de Kyungsoo: últimamente había estado bajando de peso drásticamente aunque comía correctamente, e incluso un poco más de eso. Su madre pensó que tal vez se debía a algún virus que pudo haberlo estado aquejando y como su hijo nunca se quejaba por nada, era muy difícil estar seguros de ello. Kyungsoo, por supuesto, no les dijo sobre su desorden alimenticio, mucho menos que en su baño solía vomitar lo que comía.

La verdad les azotó de frente cuando por fin lo llevaron al hospital, ahí confirmaron que su hijo no tenía ninguna enfermedad que causara su baja drástica de peso, pero sí les supieron recomendar un buen psicólogo que tratara a su hijo, porque el desmayo se debía totalmente a su débil cuerpo mal nutrido. El psicólogo se encargó de informarle a la familia Do que el menor sufría bulimia nerviosa, lo cual encontraron extraño debido a que nunca pareció preocuparse por su peso. Y aunque el hombre se ofreció a tratarlo personalmente, al final se rindió, porque el muchacho no hablaba a menos que fuera en monosílabos, ni cooperaba con las demás actividades que él le ofrecía. Asique se limitó a medicarlo con pastillas anti-estrés y que manejaran la ansiedad, porque esos eran los principales factores que afectaban a los adolescentes como Kyungsoo.