Notas 》Jihan

XX

— Hey, Seungcheol...

— ¿Si? —preguntó mientras comía.

— La persona de las notas...

— ¿Se reveló? ¿Apareció frente a ti? —dejó su sándwich a un lado para saber qué es lo que Joshua tenía que decirle.

— Me escribió diciendo que cite un lugar y hora para conocernos.

— ¿En serio? —no emitió ninguna palabra por unos cuantos segundos— ¿Quién crees que sea?

— Si te soy sincero, la verdad no tengo ni idea. No tengo sospechas de nadie.

— ¿Estás seguro?

— Si, no he visto a nadie nunca actuar raro cerca de mi. O al menos yo no lo noto

Las horas transcurrieron y Joshua seguía sin notar ninguna presencia rara cerca de él. En los cambios de hora trataba de encontrarse con el pelilargo, pero le era imposible siempre que lo veía parecía que el otro sentía y su presencia y rápidamente desaparecía del lugar. "Seguro no sabe como actuar ahora" pensó Jisoo.

— Oí por ahí que Jihoon se gusta de ti —comentó Jisoo a Seungcheol.

— Imposible, él está con Seokmin

— ¿Cómo lo sabes?

— La otra vez estaba en su casa.

— ¿Y eso que tiene que ver?

— Si invitas al chico que te gusta a tu casa ¿Qué harían?

— Pues...—pensó unos segundos y luego respondió—, tienes razón. Pero ¿Y si él no quiere nada con Seokmin?

— Igual no me importa, a mi me gusta otra persona.

— ¿Quién? —Jisoo saltó encima de Seungcheol para que pueda contárselo

— No te lo diré —sacó su lengua en forma de burla y luego rió.

— Aish...tú...

El día en la universidad se pasó volando, no habían tenido tres clases por que los profesores habían faltado, nadie preguntó porqué así que nadie sabía la causa. Al salir de la universidad pudieron encontrarse con SoonYoung y su grupo de amigos, el cual se conformaba por: Jihoon, Seokmin y Jeonghan. Joshua hizo contacto con el pelilargo, pero cuando vio que éste se dirigía a donde estaban, Jeonghan se despidió de sus amigos y se fue de allí.

Jisoo: ¿Te parece bien mañana a las 15:30 en el aula de música?

Chico de las notas: Bien, no tengo problemas

Como Jeonghan tenía dos números de teléfono pudo hacerse pasar por dos personas diferentes. El primer número es el que utilizaba para comunicarse como "Jeonghan" y el otro número era uno viejo, que ya no utilizaba, pero que cuando se presentó esta situación se le ocurrió la idea de usarlo.

Joshua se dirigía a su casa, sin compañía como normalmente solía hacerlo. A penas llegaba a su casa y ya tenía que salir para ir a trabajar de nuevo.

Ya en el restaurante, como era lunes, no había mucha gente. Saludó a todos sus compañeros de trabajo y cuando estaba por girarse para ir a su puesto pudo divisar una cabellera larga al final de la cocina, sabía perfectamente quien era y no dudó dos veces en ir hacia donde él estaba.

— ¡Jeonghan!

El nombrado se sobresaltó al escuchar su nombre con tal entusiasmo y al instante en el que reconoció esa voz, empezó a sonrojarse levemente. Jeonghan sonrió y hizo un además de "Hola", el americano también mostró una sonrisa.

— ¿Se conocen? —preguntó el chico de al lado.

— Oh si, vamos a la misma universidad —explicó Jeonghan.

— ¿Coincidencia? —dijo el chico y rió al identificar a Jisoo.

— No sabía que trabajabas aquí.

— Oh, hoy estoy reemplazando a Hyun Su ya que no pudo venir por problemas personales.

— Oh...

El chico de al lado le dio un codazo a Jeonghan en el brazo, cosa que el pelilargo no sabía que significaba, así que lo único que pudo decir fue "Nos vemos luego" a Joshua para salir del lugar y volver a su puesto de trabajo.

— ¿Te gusta?

— ¿Perdona? —preguntó Jisoo, ya que no había escuchado lo que el chico le había dicho.

— Te gusta ¿No? ¿O acaso estoy equivocado?

— No creo...que te estés equivocando.

— ¡Lo sabía! —el chico aplaudió al saber que había acertado.

— ¿Por qué lo dices? —preguntó curioso.

— Oh vamos, Jeonghan habla de ti todo el tiempo. No creo que eso sólo sea amistad.

— ¿Tú dices?

— Le brillan los ojos cuando habla de ti.

— Vaya...no sabía eso.

— Y bien...¿Ya lo has hecho con él?

Joshua empezó a reír y toser al mismo tiempo, un poco impactado por la pregunta le dio un pequeño golpe en el brazo al chico. Segundos después ya estaba en perfecto estado. El chico solo reía por la expresión que Jisoo había puesto luego de lo que había preguntado.

— Estoy preguntando en serio —el tono de voz y expresión del chico cambiaron completamente— Era broma —volvió a tener una sonrisa en los labios.

— Bien, volveré a trabajar.

Joshua volvió a su puesto de trabajo como mesero, por alguna casualidad de la vida, Jeonghan también trabajaba como mesero así que de vez en cuando trataba de hablar con él, o lo ayudaba pasándo los pedidos o las bebidas de la gente.

El restaurante cerró ese día a las 18:45 ¿Por qué cerraron tan temprano? Pues nadie quiso preguntarle al jefe porqué, solo sabían que él había salido de su oficina a decir que tenía que hacer algo y debía cerrar el restaurante por unos días. Los empleados preguntaron por sus pagas, el jefe dijo que igual iba a contar los días que el restaurante estaría cerrado.

Joshua y Jeonghan salieron del restaurante, acompañados por el chico con el que habían hablado al comenzar el turno. Caminaron por la acera un poco cansados, nadie hablaba y ninguno tenía la intención de hacerlo.

— ¿Cuándo será la boda? —preguntó el chico mientras se ponía frente a los dos

— DoYoon no seas idiota —le dijo Jeonghan de mala gana.

— Está bien, está bien. Al fin y al cabo solo intentaba alzar un poco del animo de estos chicos enamorados —el chico dio media vuelta para seguir caminando.

— No sería mala idea ¿Sabes?

Jeonghan se sobresaltó, iba a decir algo pero las palabras no le salían. Un minuto después Doyoon y Joshua estaban riendo.

— Era una broma, Jeonghan.

— Ok...

Doyoon en un cierto momento se separó de ellos, ya que su casa quedaba por otro camino. En cambio Jeonghan y Jisoo siguieron caminando unos minutos. El ambiente aún era silencioso, pero no era incómodo, era todo lo contrario, se sentía como si se decían de todo pero a la vez ninguna palabra salía de sus bocas.

— Aquí nos separamos —dijo Joshua.

— Bien...Nos vemos

Jeonghan dio media vuelta para seguir caminado, pero sintió como unas brazos rodeaban su cintura y unos labios suaves se posaban en su mejilla. Jisoo sonrió.

— ¿Acaso pensabas despedirte así nada más?

— Pues...

— A ver, bésame