La hija de los Sannin (Shippuden) Kakashi y tu.

34: reunión de los 5 Kages.

Sakura: adiós Jiraide-Sama. -sonríe- que le vaya bien.

Jiraide: dime Sensei, Sakura y muchas gracias pequeña -le acaricia la cabeza-

Kakashi: ¿estas segura que no quieres que te acompañemos? -dijo dudoso-

Jiraide: tranquilo iré con un guardaespaldas ANBU de mamá, además ira Danzou y sus ANBU no pasara nada. -murmura fingiendo tranquilidad-

Jiraiya: cuídate hija.

Naruto: Adiós sensei. -le sonríe- te ira bien ¡de verás!

Jiraide: claro Naruto, Shizune te pediré que revises la despensa de Naruto -le susurra- casi siempre compra leche en mal estado.

Kakashi: come bien Jiraide, recuerda que tienes a alguien dentro tuyo.

Jiraiya: si, come bastante y tomate un té tranquilizante en la noche.

Jiraide levanto su mano en despedida y comienzan a caminar, La aldea de la hoja comenzó a gritar dándole una cálida despedida a su Hokage.

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Mientras caminaban por el bosque Jiraide sintió unas presencias, mientras los dos ninjas de Danzou le daban un aviso, la chica los miro a todos con curiosidad esperando a que hablaran.

El ANBU de Tsunade cuyo nombre era Yute la coloco detrás de el brindándole protección.

Jiraide observo como Danzou destapo su ojo, el cual estaba envuelto en vendas, pero Jiraide no le pudo ver el rostro por que estaba de espaldas a ella. Aparecieron 4 ninjas y Danzou los atacó dejándolos heridos a muerte en el suelo.

Danzou: ¿su objetivo es la hokage o mi persona? -miro al Ninja frente a el-

Ninja: acaba conmigo. -le rogó-

Danzou lo mato clavandole su espada en el tórax, pero unas kunai iban directo a todos, Jiraide formo una pared de chakra y los protegió a todos, Danzou se sentía agradecido pero no lo demostró.

Jiraide solo escucho como danzo mataba a 16 ninjas mas y ella cerraba los ojos, la sangre le producía jaqueca y ganas de vomitar.

Danzou: estos son los últimos asesinos ANBU de la tierra de madera que aniquilamos en el pasado.

Jiraide: ¿de que habla?-miro a Yute-

Yute: no lo se Hokage-sama, pero no debemos confiar en el.

El viento movió la tela del sobrero hokage y siguieron su camino, el país del hierro.

Un lugar lleno de nieve y frío por doquier, Jiraide llevaba puesto un abrigo y Danzou se había quedado atrás con sus guardaespaldas, Jiraide caminaba esperaba tranquila junto a Yute que llevaba una capa blanca, Jiraide se observo la ropa y su fina nariz estaba congelada, sus pies se hundían en la nieve, y su cabello se estaba cubriendo de nieve.

Yute: vamos Hokage-sama, no esperemos a ese Danzou, no vamos a querer que se enferme, y menos en su estado. -advirtió-

Jiraide: tienes razón Yute, debes estar cansado y con frío, vamos.

Ambos comenzaron a caminar de nuevo, subieron unas escaleras y los samurai los esperaban.

Samurai: los estábamos esperando, porfavor prosigan, dentro hay te y chocolate caliente para ustedes.