No me limite a contemplarla una vez más, el cambio de roles era evidente. Ella jugaba a no intercambiar miradas;era una chica indiferente. Sus facciones no eran las mismas, su sonrisa sin embargo era jovial como la de su madre. Mi corazón interpretaba melodías de amor en mi interior, pero gemía de inseguridad por fuera, dude, y seguí mi camino.
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Pensamientos de media noche
De Todo¿Quieres soñar?, Acompañame a sentir, llorar y gozar. ¡Cuidado es hermoso mientras sueñas despierto!