Capitulo 6

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«El tiempo perdido nunca se recupera, creer eso es mentirte a vos mismo»

Mis labios caen en los suyos con rapidez, lo tomo de sorpresa pero al instante responde a mi beso. Nuestros labios encajan perfectamente, con mis manos sostengo su rostro sin detenerme.

Estoy en el cielo.

Sus manos me envuelven, se pozan en mi cintura mientras nuestras lenguas se entrelazan como si estuvieran hechas para esta labor.Siento como me desea, sus manos acarician mi espalda y tiemblo llena de un deseo que no puedo controlar, el beso se vuelve rápido, nuestras respiraciones se acoplan y se vuelven costosas.

Me suelta lentamente,siento que puedo respirar al fin. Lo miro al abrir mis ojos, ya esta mirándome,sus ojos me miran con un brillo que jamás había visto en nadie. Pero no vuelve a intentar besarme, solo me estira su mano y sonríe.

—Vení vamos a dormir, es tarde y estas algo tomada—Murmura tomando mi mano.

Me tambaleo un poco, sus manos me ayudan a poder caminar. Me suelta para abrir la puerta, su perfil me tiene cautivada ¿Por que no puedo evitar querer besarlo?  Esto me asusta, no puedo superar todo así de rápido y tampoco creo que algo tan bueno como él pueda pasarme ¿Es un regalo del cielo? Pues agradezco mentalmente cuando abre la puerta, mis ojos van cayendo mientras sus manos vuelven a ayudarme, solo se que me lanzo en su cama. No tiene sabanas así que solo cierro mis ojos sintiendo como entro en un sueño profundo, su respiración esta cerca de la mía. Peter me abraza y el calor inunda mi cuerpo, hago lo mismo y acaricio su rostro.

—Gracias—Susurro antes de dormir.

Mis ojos ya no soportan, me hundo en un sueño profundo y mientras el frío recorre mi cuerpo, sus manos logran hacer que al menos pueda cerrar mis ojos por unas horas.

Me despierto cuando es de día,mi cabeza duele de una manera sobrenatural a medida que mis manos pasan por ella. Me siento con ganas de nada, pero tengo sed como si no hubiera tomado agua en días.

No abro mis ojos e intento tantear donde esta Peter con mis manos. Unos quejidos me alarman enseguida, abro mis ojos y lo veo centímetros más allá, esta quieto pero su rostro luce pálido, sus ojos están apretados y su ceño muy fruncido.

—No lo hagas, por favor...No me dejes—Dice con un susurro a penas audible.

Esta soñando.

Mis ojos se abren un poco confundidos  ¿Debo despertarlo?  Esta angustiado, sus lágrimas me sorprenden. Me siento en la cama mirándolo preocupada, sigue negando con el rostro.

—Te necesito, no lo hagas—Vuelve a repetir.

Su grito me hace quedar pasmada, esta teniendo una horrible pesadilla ¿Que puedo hacer por él? Mis ojos lo observan, creo que estoy tan pasmada que no puedo mover mi cuerpo.

—Peter...—Susurro.

Toco su rostro con mis manos, lo muevo despacio y él sigue murmurando despacio.

—Tranquilo, estas soñando—Le digo meciéndolo.

Sus ojos se abren asustados, no sabe dónde está y cuando me ve suelta un suspiro de alivio. Sus ojos estan mojados por pequeñas lágrimas las cuales limpio con mis dedos.

Estoy preocupada, lo miro intentando formular alguna pregunta pero es más costoso de lo que pienso.

—¿Estas bien?—Le pregunto.

Sus ojos claros están asustados,no puede mirarme completamente y con un gesto desencajado me acaricia el rostro.

—Lo estoy,ahora volve a dormir—Susurra.

Destinos Cruzados [Laliter] Donde viven las historias. Descúbrelo ahora