16

833 56 2
                                    

Narra ________:

Desperté con el sonido de unos zapatos de tacón acercándose. Me levanté, cuando la pequeña puerta del ático fue abierta, haciendo que los rayos del sol ingresen iluminando el cuarto.

-¡Buen día princesa!- dijo Mery con sarcasmo- ¿dormiste bien?

No contesté.

-Pero ¿que es esto?- dijo molesta, mirando todo el desastre que había hecho-...se nota que amas limpiar, porque la única que arreglara esto serás tú... Ahora sal de aquí nos estamos muriendo de hambre, quiero que hagas el desayuno ahora...

Miré a mi madrastra, conociéndola sabría que tiraría todas las cosas y me ordenaría limpiar el ático, así que me adelante a sus planes

-Me gustaría quedarme con esto...- dije señalando todas las cosas de papá.

-Por mi no hay problema, si gustas quedarte con toda esa basura adelante...- dijo sonriendo con maldad-...tu papito amaba coleccionar cosas inútiles, osea quien guarda libros y mira esa ropa no soportaba su mal gusto al vestir... Bueno dejemos de hablar de muertos, y apresurate que como te dije antes me estoy muriendo de hambre...

Salí del ático lo más rápido que pude llevando el diario de papá, bajo lo que quedaba de mi vestido, entre a mi habitación y me apresure a cambiarme de ropa, tenía mucho frío, a pesar de que el clima era cálido, guardé la pequeña libreta, me coloque un pantalón jean y una blusa y bajé.

Al entrar a la cocina, ví como mis hermanastras estaban sentadas alrededor de la mesa, al verme sonrieron y comenzaron a hablar sobre el baile y las demás cosas.

-¿Vieron a Chandler?- gritó Rachel sabiendo que estaba escuchando todo-...no entiendo como existen personas capaces de rechazarlo, el pobre estaba destrozado...

-Ni tanto- añadió Brianna- no viste como después se animó y comenzó a bailar con todas. Incluso yo bailé con él.

-Si - dijo Hana- pero me dió tanta pena verlo así, apuesto que estará muy enojado con la idiota que lo dejó plantado.

Esperaba de todo corazón que Chandler no lo estuviera, no podía decirle la verdad, no después de lo que pasó, todavía no sabía si Mery haría algo en contra de tía Emma, así que no podía arriesgarme.

Estaba muy cansada, sentía mi cuerpo pesado, a duras penas podía abrir los párpados, me dolía mucho la cabeza y parecía que me desmayaría en cualquier momento.

Terminé de hacer el desayuno y subí a mi habitación, necesitaba descansar.

Cuando iba en el segundo escalón oí mi nombre y me giré.

-¿A dónde crees que vas?- dijo mi madrastra.

- Estoy demasiado cansada y mi cabeza está a punto de estallar necesito descansar un poco...

-Oh no, no iras a ningún lado, la casa esta hecha un completo desastre así que ¡arreglala de inmediato!

-Por favor solo necesitó un par de horas luego limpiaré, se...

-Nada de eso la quiero limpia ¡AHORA!

Como pude llegue hasta el cuarto donde guardaba todos los utensilios de aseo. Me propuse ordenar y limpiar todo así talves mi madrastra me dejaría dormir un poco cuando acabara.

No podía aguantar más, el dolor me vencía, había barrido todo y estaba a punto de trapear, cuando sentí que perdía el conocimiento, todo a mi alrededor se tornaba borroso y de un momento sentí como sin reaccionar mi cuerpo cayó al suelo, entonces ví todo negro.

Cenicienta (Chandler Riggs Y Tú)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora