Mi hermanastro (editando)

Adrenalina, bromas y helado.

(...)

Narra Valerie

Mire mi cabello por quinta vez y mis mejillas no podían esta mas coloradas. Mi cabello estaba pintado de azul eléctrico y mi ropa tenía pica pica. Salí de mi cuarto y entre al de Chris sin avisar.

-¡CHRISTIAN JURO QUE TE MATARE SI NO ME EXPLICAS POR QUE CARAJOS PINTASTE MI CABELLO!-Grite a todo pulmón. Se levanto asustado mirando a todos lados. Cuando noto mi presciencia se echo a reír.

-¡Pareces un...-Se carcajeo aun mas fuerte. Fruncí aun mas mi ceño y infle mis mejillas. Salí de su habitación y baje a la cocina. Busque una manzana y caramelo. Le eche el caramelo a la manzana y volví a subir las escaleras. Entre a su habitación y aun seguía carcajeandose. Me acerque y pegue la manzana acaramelada en su frente. El paro de reír y toco su frente. Yo me carcajee.

-¡Pareces un unicornio!-Tome mi estomago y me incline. Caí al suelo de la risa que tenía hasta que sentí sus manos en mis brazos. Me levanto y pego sus labios en los mios. Abrí mis ojos como platos y lo aleje.-Lo siento... Yo...-Salí corriendo. Yo enserio no quiero que mi madre me tome por loca o por putizorra. La verdad no puedo estar con el. Es algo que no se puede de ninguna manera. Entre a mi habitación y me tire en la cama como siempre. Empecé a pensar en como haría si vuelve a ocurrir y peor aun si mi madre nos ve. Es tan difícil querer tanto a alguien en tan poco tiempo. Yo en especial tengo ese problema. Me encariño demasiado rápido con la persona sin pensarlo dos veces, no soporto la idea de hacerle daño a alguien pero... Es muy difícil lo que me esta pasando en este momento.

Tocaron mi puerta.

-Chris quiero estar sola.-Grite un poco alto.

-No soy Chris, soy tu padre abreme.-Me levante aun mas rápido y le abrí la puerta. Sonrió y me abrazo.-Tu madre me dijo hacen dos semanas que estuviste encerrada un mes en tu cuarto. Pero ya veo que esta todo bien. ¿Vamos por helados?-Mis ojos brillaron.

-Como en los viejos tiempos.-Dijimos a la misma vez.

-Espérame en la sala y yo bajo enseguida.-Le dije para luego cerrar la puerta sin dejar que el hablara. Corrí al armario y saque un pantalón corto negro. Una camisa blanca con flores negras y mis converse negras. Me cepille mi cabello azul eléctrico y me lave los dientes. Baje las escaleras tan rápido que caí como siempre por ellas. Llegue a lo ultimo de estas y me levante.

-¿Hija que fue todo...?-Mi padre miro arriba de la escalera.

-El es mi hermanastro Christian. Es un idiota.-Dije y mi padre comprendió rápido que nunca tendría algo con el. Me gire un poco y le tire una guiñada al aire por que Chris se había ido a su cuarto. Me volví a girar hacia mi padre.-¿Nos vamos?-El levanto un dedo para que yo esperara.

-¡Christian vamos a comer helado! ¿¡Quieres venir!?-Abrí mis ojos como platos y empecé a negar.

-¡Con mucho gusto señor White!-Grito desde la segunda planta de la casa. Yo me di un "palmface" y fruncí mi ceño. Chris bajo las escaleras corriendo y se paro enfrente de nosotros.

-Mucho gusto. Yo soy Ethan White. Padre de esta mocosita gruñona.-Levante mi cabeza con una ceja levantada.

-De ti saque mi carácter padre.-Se quedo callado.

Valerie 1  Ethan 0

-Ya, vamos por los helados. Muero por una de fresa.-Dijo mi padre con una sonrisa. Se volteo y salió de la casa. Chris tomo mi rostro y me dio un corto beso.

-¿Entonces soy un idiota?-Pregunto cuando ya estuvimos separados.

-Sip.-Dije sonriendo.

-Un idiota el cual...-No lo deje terminar.

-Parece un unicornio.-Dije y el frunció su ceño molesto. Salí de la casa riendo y me monte en la parte del copiloto.

-¿Hija quieres manejar?-Se me dibujo una sonrisa.

-Claro papa.-Dije y el se bajo. Yo me pase para el asiento del conductor y espere a que Chris se montara. Cuando ya estuvo subido en el auto puse los seguros.-Por seguridad los cinturones puestos.-Me gire y Chris abrió sus ojos como platos.

-Oh no.-Intento abrir la puerta pero estaba trabada. Se puso el cinturón y en ese mismo momento yo acelere a toda velocidad. Mi padre se comenzó a reír. El sabía que me gustaba la adrenalina.

-¿Chris estas bien?-Mi padre se giro y se comenzó a reir.

-Si... Señor.-Frene el auto de golpe y abrí los seguros.

-Ya llegamos.-Dije y mire a Chris. Estaba pálido y sus manos estaban incrustadas en los asientos.-Oh no sabía que vendrías Chris.-Mi padre se carcajeo por mi tono de voz.

-Y mi abuela es virgen. ¿No?-Dijo Chris.

-Tranquilo. De vuelta conducirá mi padre.-El suspiro aliviado y nos bajamos del auto.