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sexto halloween

"I sat alone, in bed 'til the morning (...) And all the kids cried out, please stop, you're scaring me"
sexto halloween junto a Maks

Arrepentimiento.

Eso es lo que sentía cada sábado, cuando te veía con tu disfraz de superhéroe, jugando solo porque yo ya no lo hacía. También lo sentía cuando mirabas a mi ventana o cuando en el colegio los niños se reían de ti. Cuando te veía en tu cuarto sentado en la cama solo, llorando. Parecía que lo tenías todo, pero te sentías tan solo Maks. Me sentía como la mierda pero al ver a mi padre sonreír hacia mi, todo ese arrepentimiento se iba. Mi padre estaba orgulloso. Era todo por lo que había luchado, ahora mamá no tenía moretones ni los ojos llorosos, pero tardé en darme cuenta de que aunque no lo vea no significa que no pase.

Aquel Halloween estabas emocionado, con un brillo en los ojos.
Te veía caminar hacia mi casa y veía a mi madre abriéndote con cierto miedo a pesar de que mi padre hubiese salido. En menos de cinco minutos estaba en el marco de la puerta, mirándote.

– Sé que hace tiempo que no hablamos Ashy-Ashy pero es Halloween y había pensado que tal vez...

– Soy Asher, Maks. —Tu mirada se volvió triste y asentiste— ¿Qué habías pensado?

– Quiero un Halloween junto a ti, a pesar de todo eres mi mejor amigo, ¿lo recuerdas? ¡Maks y Ashy-Ashy, juntos hasta el amanecer del treinta y uno!

No me pude negar, simplemente verte allí me hacía recordar todo lo que te quería. Todo lo que daría por ti. Cuando nos encontramos ya disfrazados pensé en que iríamos a alguno de tus sitios horripilantes pero no fue así, fuimos a un pequeño y alejado parque. Tu cogías mi mano y yo me preguntaba por qué te hacía tanto daño.

– Tenemos once años —Aclaraste.

– Sé mi maldita edad, Maks.

– ¿Puedo preguntarte algo? —Asentí— ¿Por qué me haces eso? ¿Por qué te burlas de mi o me llamas marica? ¿Por qué me llamas raro? ¿Por que no estás a mi lado? ¿Hice algo mal? Lo siento, lo siento, lo siento.

– Maks, para. Me estás asustando.

– Jolines Asher, ¡éramos mejores amigos! ¡Hasta un niño de nuestra edad se da cuenta de que me evitas! Me has fallado, ¡confiaba en ti! A lo mejor puedes pensar que estoy bien, pero sorpresa ¡no lo estoy!

– No sabes lo que es que tu padre te odie por tener un mejor amigo como tú.

– No, estás equivocado Asher. —Lloraste— Tu eres el que no sabe lo que es que la persona más importante para ti deje de hablarte.

Y te fuiste, simplemente te marchaste dejándome solo, como lo hice yo tantas veces. Recuerdo mis manos temblando del miedo de estar solo en un parque, porque junto a ti me hacía valiente.

¿Sabes lo curioso de este Halloween?
Que me estabas criticando por haber intentado encajar insultándote y apartándote pero en menos de una semana y un par de puñetazos a un inocente tu fuiste el que empezó a encajar. Aquellos días me dí cuenta de que los antiguos Maks y Ashy-Ashy habían desaparecido a ojos de la sociedad, que nuestra amistad siempre tendría que estar oculta.

Días después, cuando noté tu cambio fui a escondidas a verte, a convencerte, no podías juntarte con esos abusones. Eran mala influencia, Maks.

– Tu encajaste apartándote de mi y estando callado mientras me hacían la vida imposible, ahora Asher yo estoy encajando a base de puñetazos y comentarios de gilipollas.

– Maks, deja ya de comportarte así —Intenté coger tu mano.

– No seas gay, Ashy-Ashy —Ironizaste.

Después cerraste la puerta de un portazo y comprendí que los niños malos lloramos por fuera para que nos vean y los niños buenos lloran por dentro para no preocupar a los demás, para ser invisibles.

— Asher.

nota de autora
Asher y Maks se supone que tienen once años, Maks cumple el diecisiete de noviembre y Asher el quince de diciembre así que según la edad están en sexto de primaria.