24 de Octubre del 2016:
Fue en la última hora del día, teníamos ecología, cuando fui con una amiga a comprar papitas con un poco de valentina. Regresé al salón y otra de mis amigas (la que se llevaba contigo en primero) me pidió y con gusto le acerqué la bolsa de papitas. Me senté en mi lugar y como mala costumbre que tengo, te miré.
Hermosa, como siempre.
Volteaste a verme y sostuve tu mirada. Sabía lo que querías. Terminé sonriendo y rodando mis ojos y tú sólo me hiciste la seña de cuando le indicas a alguien que se guarde silencio, poniendo tu dedo índice subiré tus labios, los cuáles mostraban una sonrisa, diciendo que sólo querías una.
Me paré de mi lugar al igual que tú y nos encontramos en un punto medio del pasillo hecho por las butacas.
—Eres bien pedinche —dijo mi amiga.
—¿Si, wey? —le contestaste sorniendo.
Estaba por sentarme en mi lugar cuando me diste las gracias y lo único que pude hacer, fue hacerte la seña de "de nada" con la mano.
Dos horas antes de eso, estábamos en recreo y sólo había cinco personas en el salón sin contarnos a nosotras dos y a mi amiga. Estabas haciendo tú tarea de inglés cuando volteaste y preguntaste:
—¿Cuándo vas a decir "en la tarde", es "in the afternoon"?
—Sí, "in the aftertoon" —dijo mi amiga.
—"In the aftertoon" —me burlé.
—Déjame en paz, wey.
—Sí, es "in the afternoon" —te contesté.
—¿Con doble o?
—Sí.
Nos diste las gracias y te volteaste a seguir con tú tarea. Si me hubieras pedido que te hiciera tú tarea, la hubiera hecho sin reclamos. Porque, honey, yo por ti todo lo hago.
