capítulo 7

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Para en un semáforo cerca de mi casa y aprovecha la oportunidad para mirarme. La luz roja por la cual estamos parados se refraja en su rostro y en el mío. Alarga la mano y la deja en mi muslo y yo rápidamente me deshago de su agarre. Me sonríe con una ceja en arcada y la acerca de nuevo. Esta vez la dejo donde está pero pasados cinco segundo la aparto de nuevo. No puede volverla a poner ya que la luz que nos da en la cara se a vuelto verde y tiene que seguir circulando.

-Es por ahí-

Le señalo la siguiente calle. Gira el volante a la dirección que le he pedido y observo mi vecindario atraves del cristal. Estoy echa un manojo de nervios y no me haría para nada de ayuda mirarlo a él, pero aún a si lo hago un segundo y contemplo que está sereno y tranquilo. Pasamos por delante del quiosco de Benny y le cojo del brazo para llamar su atención.

-Aquí es-

Disminuye la velocidad y para en la cera de la casa de mi vecina de alado. Mis dedos intentar quitar el cinturón de seguridad pero no lo consiguen. Sus dedos se unen con los míos y consigue desabrocharlo. Agarro mi bolso y entre abro la puerta del coche.

-Gracias por todo, te debo una.-

Salgo del coche y dice mietras me agacho para verlo:

-De nada, mujer.-

Asiento sonriendole y le cierro la puerta. La verdad es que me a quitado un gran peso de encima. Iba a dormir en un hotel y a comer algo de por hay, pero nada mejor que dormír en mi propia camita. Camino por la cera llevendo a mi propiedad pero cuando estoy apunto de abrir la puerta ponen unas manos Tibias en mis hombros sobre saltandome. Me doy la vuelta y hay esta él de nuevo.

-!Coño!... Perdón, Harry, ¿Que pasa?-

Digo con las manos en el pecho del susto que me acabo de llevar. Él se ríe y me intenta tranquilizar pasando su mano por mi brazo, pero lo que no sabe él es que a si me está poniendo el doble de nerviosa. ¡Por que tendrá que ser tan perfecto, Hasta el rizo rebelde que descansa en su frente lo es!.

-Tranquila mujer, sólo soy yo-

Se ha cerca más a mí manteniendo la impecable sonrisa todavía. De pronto saca mi móvil y me lo tiende.

-Es que no me lo esperaba.-

Digo cogiendo el móvil de sus manos.

-Estaba a punto de marcharme cuando tu móvil a empezado a sonar en el asiento del coche.-

Aparto un momento mi mirada de él y le doy al botón del móvil para mirar si eran llamadas. Tengo 4 y si es de quienes supongo les voy a descabezar por haberme hecho esto.

-Muchas gracias de nuevo por todo, Harry.-

La luz de mi entrada nos ilumina a los dos y él me mira al igual que yo haciendo que parezca una escena de película como cuando el chico de despide de ella en la puerta de su casa.

-No tienes por qué dármelas, Preciosa-

Pone un mechón de pelo detrás de mí oreja y agarra mi mano para darme un beso en ella. Sus suaves labios rozan el dorso de mi mano mientras sus ojos se conectan con los míos. En su cara veo un punto de diversión incluso una pequeña sonrisa se le forma en ella. La piel se me eriza al instante y no se si es por el fresco de la noche o por sentir sus perfectos labios. ¡Uff es por él, mi cuerpo está ardiendo y no tengo ni chispa de frío!.
Suelta mi mano y se pone recto mientras sus ojos siguen mirando los míos, trago saliva y dice:

-Buenas noches, descansa, _______-

No logro decirle lo mismo cuando se da media vuelta y lo veo cruzar mi fachada, tampoco creo que me saliera algo después de su acto. Cuando su coche desaparece me obligó a apartar la mirada de la carretera y abrir de una vez la puerta. Cuando estoy dentro me apoyo en ella y suspiro llevándome las manos al pecho.

-Que nochecita llevo hoy-

Hablo sola. Una hora más tarde me he duchado y me he puesto mi pijama de nubes mientras estoy abriendo las sábanas de mi cama para echarme a dormir. Son la 1:30 y mañana tengo que madrugar. no me hace ni puta gracia tener que ver a los dos traidores pero en fin, Leandro siempre a estado hay para mi y nunca me traicionaría, tendrá que darme una muy buena excusa mañana.
Una vez dentro de la cama le mando un mensaje solamente para que sepa que me las eh apañado sin su ayuda. Dejó el móvil en la mesita de noche y me acorruco cogiendo una postura cómoda para dormir. Llamo a Riri y ella se ha cerca y se hace una bola encima de mí. No puedo dormir completamente sola, es manía que tengo desde pequeña y aún que tenga 23 años sigo teniendo pánico hacerlo. Me basta con una mascota, al menos no estoy completamente sola en una casa. Suena ridículo pero no puedo hacer otra cosa.

Me levanto con el sonido de la alarma del móvil y me cago en to lo que se me viene por la cabeza al escucharla, pobre canción que tengo definida, le tengo un asco. Con los ojos cerrados y quejándome me levantó. Abro un ojo y me meto en el baño para lavarme la cara. Anoche me bañé no lo voy hacer otra vez. Me hago una coleta alta y me echó crema de coco en la cara para luego maquillarme, haber si se me quita esta cara de muerto que llevo. Cuando término abro el armario y me pongo un vestido lápiz azul marino y unos tacones negros abiertos. Desayuno algo y le dejó todo preparado a Riri para que no le falte nada cuando esté fuera. Salgo y cojo mi coche poniendo música, és Bueno sentirse motivada por la mañana, aún que hoy no tengo muy buena leche. Para colmo hay un atasco en la autopista y cuando me quiero dar cuanta son las 9:27... Aparcó el coche y corro por la cera de la calle hasta llegar a la puerta. La abro y camino a mi puesto sin derigirle la palabra a nadie. No quiero estar hoy chafada pero no puedo sonreirles ni ponerle la cara de pura alegría. De reojo veo como en se hablan por lo bajo planeando como van acercarse a mí. Ellos saben muy bien que tengo muy mala leche cuando me enfado y ahora no saben que hacer. Agarro mi bolso y agarró lo que busco.

-¡Alba!, ten tu móvil-

Digo dejándolo a un lado de mi mesa. Ella se ha cerca y lo agarra entre sus manos. No se va se queda hay de pie. Con sus uñas hace ruido con la pantalla del móvil y segundos después Leandro se une también. ¡¡¡Valla, los dos traicioneros mirandome!!!

-______, de verdad que cuando fuimos a buscart...-

Lo corto dejándolo con sus preciosos ojos azules de empar, empar.

-Leandro no tienes que contarme mamadas... Con vuestro permiso tengo un cliente.-

Digo oyendo como se abre la puerta. Leandro agacha la cabeza y se lleva consigo a Alba.

-Me da igual lo que digas. Luego hablamos, pupu-

Me dice sin importarle nada de lo que le eh dicho. Los dos se marchan y me dejan tranquila. Tras apuntar lo que estaba escribiendo en mi agenda levanto la cabeza para atender a mi cliente. Sus ojos y los míos se conectan y tragando saliva abro la boca para decir algo pero no sale nada y la cierro de nuevo.

-Buenos días (___tuapodo)-

Ni _____, ni señorita Cortés, ni chorras... Si no que (___tupodo). Su media sonrisa es preciosa y esta guapísimo con ese traje de dos piezas azulón y camisa blanca.

PRECIOSA (Harry Styles)+18 hotDonde viven las historias. Descúbrelo ahora