PRECIOSA (Harry Styles)+18 hot

capítulo 11

Me despierto con un dolor de cuello impresionante y aún con los ojos cerrados me quejo dolorosa. Siento un peso en mi cadera y una mano abrazándose a mi pierna. Abro los ojos perezosa y me encuentro tal y como me había quedado dormida pero con Leandro aplastándome. La tele todavía esta encendida y por lo que escucho, todavía no a dejado de llover. Me levanto dejando la cabeza de él que caiga en el sofá y me estiro a bostezando. Camino hasta mi teléfono y miro la hora. 3:25 de la madrugada. Mi atención se la lleva un mensaje  sin nombre. Es el número de Harry. Me a escrito hace 2 horas.

No se que me has echo...  No puedo dormir pensando en ti.  Bs, H

El corazón se me acelera sin poder evitarlo. Los pequeños detalles de su forma de ser me gustan, aun que quisiera que no fuera así. Siempre he controlado mis impulsos a la hora de que me atraiga un hombre pero esta noche he descubierto una nueva faceta mía, no puedo controlar nada cuando estoy con él. Me he llevado el móvil al pecho abrazándolo sin que me de cuenta y con un suspiro lo aparto de mi dejándolo donde estaba. No me siento valiente para contestarle, a demás de que es ya demasiado tarde para hacerlo.
Arrastrando los pies, vuelvo al sofá y despertando a Leandro lo llevo a la cama conmigo. Sinceramente no me apetece dormir sola y menos con el clima de esta noche. Nos acostamos en la cama y él dormido me da la espalda. Yo hago lo mismo y intento dormir queriendo dejar aparte el mensaje que me tiene cazando moscas.

A la mañana siguiente tengo un calor insoportable y siento mi cuello y espalda sudada. Me estiro apartando la colcha de encima de mi y a Leandro. Duerme fatal el Cabrón.
Me levanto de la cama y cogiendo un par de cosas de la habitación me meto al baño para darme una ducha.

Termino, me visto y me arreglo mas de lo que esperaba y voy a la cocina a preparar el desayuno. Riri viene hacia mí acariciando con su cuerpo peludo mis piernas. Le lleno el cuenco de comida para hoy y miro la hora en el reloj de la cocina. 7:30, le chillo a Leandro que se levante y se prepare por que por el seguiría en la cama hasta las una o las dos del medio día. Preparo café y sacó algunas pastas para desayunar. Yo no suelo desayunar mucho mas que mi Colacao, pero él si. 15 minutos después aparece duchado y medio vestido. Solo lleva los zapatos y el pantalón puesto. Y la camisa la trae en la mano y dejándola en el respaldo de la silla colgando empieza a prepararse un tazón cereales.

—Mañana tengo una cita.

Dice y yo lo miro a través de mi taza. No me sorprende, siempre esta igual. A veces me preocupa que mi amigo mujeriego no encuentre el amor de su vida nunca. Me mira esperando a que le digo pero yo tragando sorbo de café me en cojo de hombros.

—_______, se lo que piensas y que estas cansada de que siempre este igual. Pero ella es diferente. Me a costado muchísimo que aceptara la cita y por eso necesito tu ayuda. No quiero cagarla otra vez. Quiero que me lleves de compras y me vistas como a las mujeres os gusta que vista un hombre y los trucos para enamoraros.

Dice casi suplicándome. Hostia le a dado fuerte. Pero sin embargo no me ilusionó tanto por él pero dentro de una semana pasara de ella igual que con las anteriores. Dejando la taza en el friega platos me vuelvo a él.

—Sobre lo de vestir no te hace falta mi ayuda, tu te vistes demasiado bien. Y la verdad es que no hay trucos para enamorarnos, bueno si uno... Se tu mismo. Una se enamora sin trucos de por medio.

Aparta el cuenco dejándolo a un lado y se levanta estrechándome contra su cuerpo. Pongo los ojos en blanco y le doy palmadas en la espalda.

—Aun a si te vienes después de trabajar conmigo. Si va bien te la presentare algún día, es guapísima.