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‹ POV YOONGI ›

—De algo... de alguien.—me miró a los ojos.

—¿Y quién es ese ''alguien''?

—Eres tu, Yoongi. Me gustas.

—Ah bueno, dale contame otro chiste. Qué mierda dices, Jimin. Fumar hace mal, eh. —miré el cigarro— ¿Acaso estás fumando marihuana y no mi di cuenta? A parte tu estás de novio con el tal Kookie. Déjame de joder con tus idioteces.

—Nosotros terminamos.

—Tu eres hermoso y toda la cosa, pero soy un demonio y tú eres un ángel. No quiero estar contigo. Somos polos opuestos.

—Aún que seas demonio tu a mi me gustas siendo o no un demonio.

—¿Y desde cuando sentís esto? No puedes.

—Desde que te miré.

—No sé de que sonríes, estúpido.

—Aún que tu a mi no me quieras yo si te quiero. Y si hace falta demostrarlo, lo haré.

—Te estás metiendo en un infierno que no podrás salir.

—Tal vez yo quiera quemarme en ese infierno, arder en ti. Meterme en tu infierno para estar a tu lado a pesar de que seamos lo que somos.

—Lo más cursi que escuché en mi larga vida.

—sonrió— Lo tomaré como un cumplido. —arrojó el cigarro y se acercó a mi— No sé como ha sucedido esto. —me abrazó.

Se me está ocurriendo una hermosa idea. Sonreí internamente. Puedo usar que él gusta de mi y poder corromperlo. Si juego con él, tal vez al estar herido toda el odio e ira brote de su ser y en ese momento se corrompa. Un camino para entrar arrojarlo al infierno.

—me separé de él— Ya, deja de abrazarme cuando quieras. —sonreí.

—sonrió— La primera vez que te veo sonreír. A parte del otro día, sólo sonreías cuando hablabas con Hoseok, lo envidio.

—Estás imaginando enanitos verdes bailando twerking, ¿verdad?

—Te estoy viendo a ti.

—Deja de joder. Mejor vayámonos, tengo sueño.

Bajamos y entramos ahí. Me acosté sobre el sofá. Ser gato me afectó.

—¿Tienes hambre, Yoongi?

—Si.

—Taehyug nos invitó a su mansión para cenar, dice que es el cumpleaños de su abuela. Porque yo me llevo bien con su abuela y me invitó.

—De acuerdo. Voy a tomar una ducha.—caminé hacia el baño.

Entré y me duche. Abrí el agua hirviendo, sentir el agua caliente rozar por todo mi cuerpo me hace recordar a la tortura que aplican en el infierno.

‹‹Eres tu, Yoongi. Me encantas.›› recordé a Jimin

¿Porqué eres así Jimin? Sal de mi maldita mente. Apreté mi puño. Terminé rápido de ducharme. Maldición, no tengo ropa.

-¡Jimin!-grité para que me escuchara.

-¿Qué?

-¿Puedes prestarme ropa?

-¿Acaso tu no la puedes crear?

-Si, lo puedo pero me da fiaca.

-Busco algo para ti y te lo paso.

Esperé por un rato y golpeó la puerta. Abrió la puerta y sólo extendió la mano con la ropa. La tomé y cerro la puerta.

-Esto es ropa de marca.-murmuré- ¡Jimin! -grité de nuevo.

-¡¿Ahora qué necesitas?! -gritó.

-Esto es de muy buena marca ¿cuanto cuesta?

-Qué se yo. Mis padres lo compran, por nada vivo en un departamento lujoso ¿no crees?

No contesté y me vestí, una camisa negra y pantalones del mismo color. Me queda muy al cuerpo. Salí del baño y él estaba en el sofá acostado. Fui hacia a el y me puse frente a frente.

—¿Estás listo?-preguntó y se levantó. Asentí.— Vayámonos.

× × ×

Luego de cenar en la mansión de Tae, jugamos al poker.

—¿Y el pastel?-preguntó Taehyung.

—Lo vamos a comer después luego, cariño.—contestó la abuela— Comiste 4 platos. Pero si sigues con hambre cocino otra cosa.

—No, gracias, abuela.—vio de nuevo sus cartas.

El ambiente era tenso, el silencio incomoda. Todos estábamos concentrados en no perder contra la abuela, esa jodida abuela sabe como jugar realmente bien.

-¿Como vas, Yoongi?—preguntó Jimin que estaba al lado mío. El no jugaba pero igual estaba en la mesa.

-Voy a ganarle a la vieja.-me levanté y tiré las cartas- Te gané vieja.-dije mirándola.

-Estás en tu día de suerte, jovencito. Me ganaste pero la próxima vez no perderé.-sonrió- Eres muy bueno.-extendió la mano y correspondí- Buena jugada, Yoongi. Hace mucho no jugaba contigo.

-Igualmente, vieja.

-¡Vamos a comer paste!-gritó Tae.

Yo no canté, solo me quedé bebiendo. Ellos contaron y aplaudieron, al momento de que la abuela sople la vela, se le cayó la dentadura.

Namjoon fue con Jin en el patio. Las ganas les ganaron, parece, y Jin, no puedo creer que te estés tirando a un sacerdote, hermano. No te puedo creer.

Luego de que terminara de cantarle a la vieja, Jimin se sentó al lado mío mientras comía el pastel.

-¿Quieres?

-No tengo hambre.-bebí el vaso de vodka.

Se fue la luz. Todos quedamos a oscuras. Yo puedo ver a la oscuridad. La abuela se cayó de su silla del susto.

-¡¿Qué pasó?!-dijo la madre de Tae.

-Los pequeños rompieron unos cables haciendo que toda la electricidad se fuera.-hablo un hombre.

-Malditos primos mocosos. Por eso yo odio tener fiesta familiares.-dijo Tae- Hoseok, Jimin y Yoongi, vamos salir afuera, en el patio.

Caminamos hacia allí, Hoseok encontró un columpio en el árbol del patio y se columpió. Mientras nos sentamos al rededor del gran árbol.

-Jimin.-susurré a Jimin en el oído.

-¿Qué sucede?-susurró.

-¿Puedes ver en la oscuridad?-asintió.

-¿En dónde está Jin?-preguntó Jimin en voz alta.

-Esta teniendo sexo descontrolado con Namjoon en la casita del árbol.-señaló la casita que estaba en el árbol.

-Qué obsceno.

-Vamos a jugar.-dijo Hoseok.

—¿A qué?—contestó Jimin

—Verdad o reto.

demons and angels ; jm + ygDonde viven las historias. Descúbrelo ahora