demons and angels ; jm + yg

22

Narrador Omnisciente.

Yoongi tenía que ir al infierno por orden de la reina. Jimin lo acompañó aunque el contrario no lo quería que lo acompañe, pero se encaprichó.

—No tendrías que estar aquí, Jimin. —dijo Yoongi mientras caminaba al reino.

—No me importa.

Llegaron a la gran puerta en dónde estaba el reino y se abrió al sentir Yoongi.

—Por fin llegas, Yoongi. —dijo unos de los reyes al verlo—¿Qué hace un ángel aquí? Largo de aquí, Jimin. —ordenó.

—Pero...

—No importa que él esté aquí.—dijo la reina, madre de Yoongi— Es aún mejor que están los dos.

—El Diablo está llevando a ángeles y demonios para que trabajen con él, como esclavos. —dijo otro rey— Yoongi tienes que encontrarlo, ahora.

—¿Y cómo pretendes que lo haga?

—¡Yoongi y Jimin! —gritó una chica interrumpiendo la charla. Se giraron a ver quién era y la observaron.

—¿Y tú quién eres? —preguntó Yoongi.

—Vete de aquí, Hikari. —dijo una reina— No debes a t—se detuvo— ...No puedes ver a Jimin ni a Yoongi. 

—Si los puedo ver.—sonrió— Están igual de hermosos.

—¿Qué dices?—preguntó Jimin— ¿Acaso conoces a Yoongi de antes? ¿Eh?

—Siempre tan celoso, Jimin.—sonrió la chica— No voy a decirles nada antes que me decapiten.

La extraña chica, Hikari, vestía de traje blanco, sus ojos eran azules y llevaba un reloj de bolsillo dorado que llevaba detrás una iniciales: Y&J. Tenía el cabello largo de color totalmente blanco y no eran canas.

—¡Sal de aquí! —gritaron todos los reyes al mismo tiempo.

La chica se acercó a Jimin y a Yoongi.

-¿Están listos para la cuenta regresiva? No hay tiempo para correr.-susurró en sus oídos- Que nos volvamos a ver.  -sonrió y desapareció haciéndose humo blanco.

—¿Y la chica loca quién era?—preguntó Jimin— ¿Y qué significado tiene lo que nos dijo?

—A mi me agradó.

—A ti no te tiene a agradar nada.

—Me gusta su actitud misteriosa, tonto.

—A ver, aquí no queremos nada de amoríos ¿entendieron?—avisó la reina— No me gusta nada que tú, Yoongi, estés pasando mucho tiempo con ese ángel.

—Te aguantas, vieja.

—Tu eres el rey de las mentiras, no sé porqué estás tan al lado de Jimin. —suspiró— ¿Cuándo será el día que me llames madre?

—Ese día no existe.

—Déjalo ser, Noreya. —dijo el esposo de la reina, que también era parte del reino.

—Namjoon me cae mejor que Jimin.

—Ah, no te puedo creer, vieja. ¿Ahora vas a comparar a Namjoon con Jimin?

—Hablando de Namjoon. Tienes que ir a visitar a Jin, hijo. Él te tiene que decir algo.

—De acuerdo.—contestó Yoongi y miró a Jimin que estaba escuchando atentamente todo lo que estaban hablando.

Salieron de allí, volvieron al mundo mortal y fueron directamente hacia el departamento de Jin. Tocaron la puerta y les abrió Namjoon, ya no era novedad que Namjoon estuviera en el departamento de SeokJin siempre, así que no se preguntaron porqué está allí en absoluto.

—¿Y en dónde está Seok? —preguntó Jimin al entrar en el departamento.

—Está en la cocina.

Se dirigieron en la cocina, allí estaban también Taehyung y Hoseok, sentados al lado de SeokJin. Los saludaron y se sentaron al frente de el, mientras Namjoon se quedó al lado de SeokJin.

—La vieja dijo que me querías decir algo. —habló Yoongi— ¿Qué quieres decirme?

—Yoongi...—Jin miró a Namjoon.

—Yoongi.—habló Namjoon— Es muy difícil de confesártelo.

—Sólo díganlo.

Los miraron preocupados.

—Tranquilos, ¿qué ha pasado?—habló Jimin agarrando la mano de SeokJin, tratando de calmarlo- Hablen con calma.

—Yo... estoy....

—¿''Yo estoy''? Dilo completo, Jin. —se hartó— No tengo todo el día.

—Estoy... —agarró la mano de Yoongi y lo miró fijamente— Vas a ser tío, Yoongi.

—No entiendo nada. —respindió.

—Estoy embarazado, Yoongi. Vas a ser tío.