La belleza no se mide en tallas, no se mide en dientes perfectos, no se mide por color de ojos o forma de vestir, no se mide por el color de tu cabello o por tu postura. La belleza se mide por tu intelecto, por las sonrisas sinceras, por las caricias y las palabras. Se mide en la pasión con la que haces lo que te gusta, por como tu nariz se arruga al sonreír y por la forma en la que tus pupilas se dilatan cuando ves a la persona que amas. Se mide por el amor que entregas, por los consejos y abrazos que das a quien los necesita, por tu esfuerzo por alcanzar tus sueños, por tus ganas de seguir adelante.
La belleza no se mide en apariencias, se mide en acciones, en emociones. Porque como dicen por ahí, nunca debes juzgar a un libro por su portada.
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Broken Thoughts.
Short Story*Escritura creativa* Estos son pequeños escritos que no encajan en ninguna parte más que en mi cabeza.
