✨
Extensión: 1434 palabras.
✨🌇
Las manos de KiBum se mueven perezosas sobre las sábanas cálidas con la finalidad de localizar su único objetivo, tanteando el terreno mientras abre los ojos completamente somnolientos y estos se deleitan con la tenue claridad que se asoma a través de la delgada tela de las cortinas de su cuarto.
Las yemas de sus dedos acarician la suavidad de aquella tersa piel que se atreve a decir que ya conoce bastante bien. KiBum se ha esforzado por conocer cada centímetro de aquel cálido cuerpo que decide rodear con ambos brazos a la altura de su cintura con gran dificultad; haciendo que su mano traviesa se escabulla por el ligero hueco que encuentra donde el tronco se conecta con aquellas preciosas caderas cuadradas que tanto le gustan.
A KiBum le gustan un montón de cosas de JongHyun. Cuando se remueve perezoso sobre la cama y se acomoda nuevamente, sintiendo la nariz de KiBum rozar su columna vertebral como cada que el castaño decide torturarlo de aquella manera. Es una costumbre que KiBum ha tomado, el abrazarlo por la espalda y adaptarse a su cuerpo casi con perfección, suspirando sobre su dorso su aliento caliente que le produce una sensación que aún no puede describir; después roza con un movimiento sutil su nariz sobre el hueso de la columna vertebral y deposita un cálido beso ahí, justo en uno de sus omoplatos.
A KiBum le gusta mucho la espalda de JongHyun, quizá tanto como sus torneados brazos que ha logrado conseguir con el esfuerzo del ejercicio diario, o casi diario, así que con sus dedos se anima a recorrer aquella silueta como si sus dedos fuesen pies que se mueven por propia fuerza de voluntad. Toda la voluntad de KiBum anda en ese lugar, recorriendo centímetro a centímetro su piel mientras se muerde el labio inferior al observar como a JongHyun se le eriza la piel a manera de reacción.
Le gusta provocar ese tipo de sensaciones en él, le gusta sonreír mientras el otro se remueve hasta quedar boca arriba, soltando un suspiro mientras que sus ojos parpadean con dificultad, porque está más dormido que despierto.
JongHyun suelta un suspiro largo y tendido mientras la sonrisa de KiBum se esparce sonora por toda la habitación, así que se gira una vez más para observar aquel rostro que adora, porque le gusta que sea una de las primeras cosas que vea al despertar.
KiBum hace un puchero especial y JongHyun esboza una sonrisa, cubriéndose la boca con la sábana porque lo primero que quiere hacer al verlo es besarlo, y KiBum es demasiado especial con los besos mañaneros. JongHyun no se resiste y besa al castaño efímeramente a través de la tela, cerrando los ojos un instante, como si ese instante lo fuese todo.
El rubio atrapa ese momento en sus pupilas y bosteza una vez más, mientras la claridad del día comienza a colarse por la ventana para terminar de despertarlos.
ESTÁS LEYENDO
Canciones para Kibum ❀ JongKey
Fanfic❀ Si le preguntaran ¿Qué es lo que te gusta de Kibum? Seguramente la única manera en que JongHyun pudiera responder sería con canciones, con el montón de trazos sobre servilletas de una cafetería y una vieja libreta de anotaciones. Donde JongHyun gu...