Capitulo uno

184 27 5
                                    

Plano, incoloro, desconocido.

Blanco, blanco.

Luz, cegadora y blanca luz. Fría. Artificial.

Blanco, blanco.

Completamente cerrado, no ventanas, no sonido. Sábanas de algodón, almohada suave, paredes tan blancas que en sus ojos sintió un escozor.

Blanco, ¡demasiado blanco!

Vacío, juró oír su respiración al sentarse en la cama.

Blanco... ¡todo era blanco por Dios!

¿Hospital, manicomio, prisión, lo secuestraron? No supo decir. Observó su alrededor. Líneas, tan finas como un cabello formaban un gran rectángulo en la pared. Una puerta. Un segundo le fue necesario para ponerse en pie, y así mismo un segundo le tomó caer. Inútilmente intentó intentó levantarse pero sus piernas flaqueaban y acabó arrastrándose hasta la puerta.

¿Hace cuánto no se levantaba?

Golpeó fuerte, tanto que creyó rompería los huesos de su mano. Nadie respondió. Una, dos, tres, diez veces. Nada.

Silencio. Sus oídos zumban ante ello.

Nuevamente empezó a oír su respiración, se estaba desesperando. Su claustrofobia estaba actuando.

Oh maldito silencio. Asqueroso blanco, ¡por un demonio se sentía asfixiado en esa monotonía!

Sus pensamientos se mezclaba, sin saber a dónde correr, qué hacer, olvidándose a segundos de cómo respirar.

Sé racional. Contrólate.

Él no debía desesperarse, necesita pensar, recordar. Pero, he ahí un problema. Lo último que recordaba era a su esposo y la cena que tuvo con el mismo en su aniversario. Nada más.
Absolutamente nada.

Recostó su espalda en la puerta aún sin levantarse del frío suelo, entre sus manos escondió su rostro. Su garganta se cerraba, las manos le hormiguaban. Pensó, pensó, pensó a mil por segundo pero nada le daba razón para estar ahí.

« Guarda la calma Hannie. »


Paró. Los temblores, la desesperación se fueron en el segundo que recordó a su pareja calmandole en esos pequeños episodios de ansiedad suyos.

Sehun.

Sehun es lo unico que recuerda, entonces... ¿por qué no estaba ahí? ¿Él estará bien? ¿Lo habrán lastimado acaso?

Contrólate, hazlo por Sehun.

Su Sehun podría peligrar en este momento y el no podía hacer nada para ayudarlo, mucho menos desesperandose.

Lo último que recuerdo eres tú. ¿Qué es lo que te sucedió mi amor?

.

La historia será corta. Ya esta casi terminada en mis borradores así que no se preocupen por lo tortuga que soy normalmente.

White; HunHanDonde viven las historias. Descúbrelo ahora